Más de 70 países y organizaciones internacionales buscan una solución pacífica al conflicto que vive el país por la confrontación entre Israel e Hizbulá y, sobre todo, de una ayuda humanitaria de urgencia.
Aunque aún no ha habido reacción oficial desde el grupo armado palestino a la muerte de su líder, Yahya Sinwar, el partido milicia chií libanés confirma una escalada en próximos días y que está utilizando misiles guiados de precisión. Ankara advierte: "No debería haber guerra por la estabilidad y seguridad de los pueblos, pero si Irán actúa en defensa propia, tiene su derecho".
El alto cargo del partido chií se trataría de Husein Muhamed Auda, responsable de coordinar el lanzamiento de cohetes contra Israel desde el distrito meridional de Bint Jbeil.
La Fuerza Provisional de la ONU para el Líbano acumula ya 20 heridos por ataques de Israel, que sostiene que sus cascos azules son escudos humanos de Hizbulá.
La Cúpula de Hierro, la Honda de David y el sistema Flecha suman un escudo triple tremendamente eficaz, pero no cubren el 100% de los ataques: el mortal impacto de drones de Hizbulá de ayer pone en evidencia sus lagunas.
La UNIFIL reubicó temporalmente a 300 pacificadores y tiene previsto el traslado de otros 200 según la situación de seguridad. Indonesia, de donde eran los dos militares heridos por un tanque israelí, reclama una investigación.