Europa activa las alarmas y sus defensas ante el inesperado plan de EEUU para acabar con la guerra en Ucrania
El primer ministro de Estonia, Kristen Michal, ha lanzado una seria advertencia.
Una de las consecuencias de la inminente llegada de Donald Trump a la Casa Blanca será, previsiblemente, la reducción del apoyo militar a Ucrania para lograr que la guerra que libra frente a Rusia acabe cuanto antes.
Sin embargo, Europa ya está avisando de que la cantidad de recursos destinados a Ucrania no debe disminuir si se quiere evitar que el presidente ruso, Vladímir Putin, vea incrementadas sus ansías imperialistas.
En el comienzo de la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea (UE) que se está celebrando en Budapest (Hungría), varios han sido los mensajes en esa línea ante el reciente triunfo de Trump.
En concreto, los líderes europeos han subrayado la necesidad de seguir enviando ayuda a Ucrania en su lucha contra la agresión militar rusa, ya que lo contrario significaría enviar un mensaje de “vulnerabilidad”. Igualmente, los mandatarios han destacado que es esencial que la Unión Europea refuerce su propia seguridad y defensa.
El presidente ucraniano rechaza las propuestas de "gente que ha hablado con Putin, pero que nunca se ha enfrentado a Putin", como ha señalado de Viktor Orbán en plena presidencia húngara de la UE.
Uno de los que más claramente se ha pronunciado en ese sentido ha sido el primer ministro de Estonia, Kristen Michal, quien ha asegurado que el resultado de la guerra iniciada por Rusia en territorio ucraniano tendrá implicaciones duraderas para los valores y la seguridad europeos.
De hecho, el dirigente estonio ha alertado de que permitir que Rusia altere por la fuerza las fronteras de Ucrania provocaría que los principios europeos se vieran seriamente debilitados.
