Miquel Iceta: "No va a haber un acuerdo sobre la independencia"
Entrevista al líder del PSC: "Creo que ERC apoyará los presupuestos"
Siempre tiene abiertos varios libros a la vez. Es una de sus manías. El universo de Miquel Iceta está dominado por la política, pura intuición, juego de poder. Pero a la vez suena a Queen y Tina Turner. Una mirada que busca acuerdos como cuando contempla las obras de sus artistas favoritos, Joan Miró y David Hockney.
Ya suenan tambores electorales en Cataluña y Miquel Iceta (Barcelona, 1960) está preparado para la batalla. Tiene claro que Quim Torra convocará la fecha cuando se lo diga Carles Puigdemont pensando en las opciones de Junts. Y advierte, frente a los cantos de sirena del tripartito que muchos airean, que los independentistas volverán a formar Govern si les da la suma.
Todo a la vez que se ha puesto en marcha la Mesa de Diálogo este miércoles en La Moncloa. Será un proceso largo y difícil, advierte, pero se pone fin a la ausencia de diálogo entre los dos gobiernos y ha arrancado “con buen pie”. Madrid y Barcelona deciden el futuro de la otra. Lo que cree es que Esquerra apoyará los presupuestos generales. Y, ante las proclamas apocalípticas de la derecha, deja claro que no va a haber un acuerdo sobre la independencia. Su apuesta: un pacto para un autogobierno más sólido.
¿Qué le parece el resultado de la primera reunión de la Mesa de Diálogo? ¿Satisfecho?
Estoy muy satisfecho tanto por la constitución de la Mesa como del resultado de la primera reunión: se pone fin a la ausencia de diálogo político entre los dos gobiernos que se inició en 2012. El camino será largo y difícil, pero se ha iniciado y lo ha hecho con buen pie.
¿Cómo está Cataluña a día de hoy?
Dividida, expectante, temerosa, esperanzada, una mezcla de sentimientos. Ahora está esperando unas elecciones, que no se sabe cuándo serán, pero pronto. Y esperando ver si la perspectiva de diálogo que se ha abierto sirve de verdad para abordar el conflicto.
¿Podremos ver en la Cataluña postelectoral un ‘tripartito’ entre PSC, ERC y los ‘comunes’?
No, yo creo que podremos ver que si hay mayoría independentista, va a seguir habiendo un Gobierno independentista con un presidente independentista. Y si los independentistas pierden la mayoría, se abren otras perspectivas. A día de hoy, lo que nos dicen las encuestas es que los independentistas volverán a sumar y, por lo tanto, no van a cambiar de rumbo. Por lo cual, desde nuestro punto de vista, es un error. Las elecciones son una oportunidad para pasar página. Pero hoy las encuestas nos dicen que no van a cambiar muchos.
Todo lo que pase en Barcelona va a influir en Madrid y al revés. ¿ERC apoyará los presupuestos?
Yo creo que sí. Esquerra ha hecho una apuesta por el diálogo, la negociación presupuestaria puede suponer consecuciones concretas, objetivos, resultados e inversiones. Creo que ERC va a jugar esa baza.
Y en este Matrix político. ¿Es Torra el presidente de la Generalitat?
Sí, lo es. El PP ha intentado llevarlo a los tribunales y le quería acusar de usurpación de funciones. Ni siquiera se ha admirado a trámite esa querella. Sigue siéndolo, pero ha dejado de ser diputado del Parlament.
¿Cuál es la solución que plantea sobre la mesa el PSC para resolver el conflicto?
Lo que querríamos es un acuerdo que implique un autogobierno más sólido, una mejor financiación, unos mecanismos para participar en la toma de decisiones estatales y un mejor conocimiento de la realidad catalana. Queremos un pacto que los ciudadanos puedan votar.
Una cosa que siempre plantea dudas cuando se habla de una consulta en en el acuerdo del PSOE y ERC y muchas veces no se termina de comprender, ¿podría ser un referéndum de independencia?
No, porque sólo se puede consultar aquello que se acuerde. Y no va a haber un acuerdo sobre la independencia. Puede ser sobre un pacto de autogobierno, pero no sobre la independencia.
¿Cómo se desjudicializa la política?
En primer lugar, hay que conseguir que todo el mundo cumpla la ley. Entonces las cosas no llegan a los tribunales. En lo que se refiere a sentencias ya producidas o juicios en marcha, lo que hay que intentar es que la perspectiva de un acuerdo político haga que nadie piense que desde la Justicia se está defendiendo la unidad de España porque eso se hace por vías políticas. Y, por lo tanto, hemos de mirar si hay mecanismos para aliviar algunas de las penas que han recaído sobre los dirigentes independentistas y eso puede venir sobre la base de una reforma del Código Penal.
¿Cómo sería esa reforma?
Hay alguna idea que algunos tenemos, lo que se produjo a finales de 2017 no encaja bien con el tipo de delito de sedición, que es el que el Tribunal Supremo adoptó. Por lo tanto, se podrían rebajar las penas. Y luego habría que ver si estamos diciendo que eso no se ajusta a lo que pasó, pues cómo se incorpora al Código Penal. Sin duda, atentar contra la Constitución es un delito y debiera tener una sanción penal. Por lo tanto, puedes rebajar la sanción pero tendrías que prever la sanción por si se vuelve a producir.
La derecha habla de una reforma ad hoc para Oriol Junqueras. ¿Lo hace convencido el Gobierno o por conseguir el apoyo de ERC?
Son muchos los juristas que después de haber leído la sentencia y de haber apreciado los matices que la propia sentencia incorpora dicen que probablemente nos convendría recoger un tipo de atentado a la Constitución que no es el golpe de Estado clásico que dio lugar a los delitos de rebelión y sedición. No es solo una opinión por lo que ha pasado, sino que ha movido a la reflexión a mucha gente y juristas, entre ellos el ministro de Justicia, que están diciendo que es posible mejorar la regulación que hay.
¿Es partidario de conceder indultos a los políticos presos?
Depende. Primero han de pedirlo. El indulto es una medida de gracia que la decide el Gobierno, conocido el parecer del tribunal sentenciador. Entonces, creo que todos nos hemos adelantado mucho en ese planteamiento porque por ahora nadie ha pedido el indulto, incluso Junqueras llegó a decir que se metan el indulto por donde les quepa.
¿Tiene solución la situación de Cataluña? ¿Cuántos años tendrían que pasar para vivir una especie de normalización de la política y entre la sociedad?
Creo que tiene solución, no va a ser sencillo, pero que probablemente podamos alcanzarla en tres o cinco años, teniendo en cuenta que el problema viene de muy lejos y que se ha enconado particularmente desde el año 2012 hasta 2019. Han pasado siete años, necesitaremos al menos tres o cinco años para resolverlo.
¿Qué siente cuando escucha a Pablo Casado y a Cayetana Álvarez de Toledo decir que el PSOE ya no es un partido constitucional?
A veces pretende dar lecciones quien no puede darlas. Recordar que fue uno de los predecesores del PP, Alianza Popular, el que estuvo en contra del artículo segundo y el Título VIII de la Constitución. Los socialistas estuvimos en su elaboración, aprobación y defensa siempre. No podemos aceptar lecciones de quien no tiene garantías para darlas.
¿Le preocupa la deriva hacia la derecha del PP?
Pues sí, porque yo creo que el futuro del diálogo está en posiciones moderadas y, por lo tanto, quienes se radicalizan en un sentido o en otro acaban siendo un obstáculo para el diálogo. En España necesitamos un bueno Gobierno, pero también una buena oposición, la que es capaz de llegar también a acuerdos en temas de Estado. Por desgracia, el PP hoy no está en condiciones de hacerlo. Espero que tarde o temprano lo esté.
Por cierto, en estas elecciones catalanas va a irrumpir por primera vez en el Parlament la extrema derecha. ¿Tiene miedo a que se sienten en los escaños Vox?
Preferiría que no sucediese, pero es verdad que ya en las generales Vox obtuvo representación por la provincia de Barcelona. No sería de extrañar que entraran en el Parlament. Preferiría que no estuviesen, pero es una decisión que depende de los ciudadanos.
¿Se pueden fiar de ERC cuando no aprobaron los anteriores presupuestos y se tuvieron que adelantar las elecciones?
Siempre digo que la confianza es una cosa de ida y vuelta y cosa de dos. Es una cosa que hay que construir, a veces se puede deshacer, pero también se puede rehacer. ERC ha tomado un camino favorable al diálogo y la negociación, eso es muy buena noticia. Entre todos hemos de hacer posible que esa negociación llegue a acuerdos y, por otro lado, que la posición de Esquerra pueda manterse a lo largo de tanto tiempo como seamos capaces.
¿Cómo han sido estos años de Gobierno de Torra?
Ha sido un mal Gobierno. Las propias encuestas del CEO recogen que sólo está satisfecho del Ejecutivo un 1,5% de la población. Estamos ante el peor Gobierno desde que recuperamos la autonomía.
Fue uno de los principales apoyos de Pedro Sánchez para lograr un entendimiento con Podemos. Vivimos una situación inédita: el primer Gobierno de coalición desde la II República. ¿Le gusta este Ejecutivo? ¿Duerme tranquilo?
Dormía tranquilo antes y después. Las izquierdas deben entenderse y respetarse en sus diferencias, pero deben ser capaces de colaborar. Estoy muy contento de que se haya alcanzado un acuerdo y que se haya formado un Gobierno de coalición, que en poco tiempo está demostrando cohesión interna y eficacia en el cumplimiento de sus compromisos. Hemos tenido la subida de las pensiones, del salario mínimo y de las retribuciones de los funcionarios.
¿Huele el batacazo de Cs en Cataluña?
Las encuestas así lo apuntan y la propia decisión de Cs de ir con el PP a las elecciones demuestra hasta qué punto se han dado cuenta que se han quedado sin proyecto y que su futuro está ligado a una fusión con el Partido Popular. Por lo tanto, creo que eso está más que cantado.
¿Le gusta la elección de Dolores Delgado como fiscal general?
Me gusta. Primero, la conozco, me merece confianza personal, política. Y los que conocen su labor como jurista te dicen que es bueno. Por lo tanto, ¿por qué no? Es verdad, hay quien dice que pasar casi directamente del Gobierno a la Fiscalía es un problema, pero siempre me acuerdo que Kennedy nombró a su hermano. En este caso hay que juzgar por las decisiones que tome. Habrá que dejar pasar un tiempo para ver si está a la altura de las expectativas de muchos o tienen razón sus críticos.
¿Cuál sería su fórmula ideal de Gobierno en Cataluña tras las elecciones?
Sería un Gobierno presidido por mí. Es un poco presuntuoso pero lo creo. Creo que podría presidir un Gobierno transversal que no fuera de un bloque contra otro, que fuera capaz de reunir a muchos catalanes en tornos a objetivos comunes, como el reforzamiento del autogobierno, la mejora de la financiación, el progreso de nuestra economía, la reducción de las desigualdades y los desequilibrios territoriales, la lucha contra el cambio climático, la mejora de los servicios públicos.
¿Teme que Torra aplace las elecciones y se vaya a un escenario de otoño?
Es posible. Convocará las elecciones cuando crea que le pueden ir mejor a Junts. En definitiva, hará caso a lo que diga Puigdemont a este respecto. Por lo tanto, en este momento que las encuestas señalan que Esquerra ganaría, creo que no hay prisa por parte de Torra de convocar las elecciones. En sentido contrario, si de repente se viera que se produce una recuperación de Junts o una rebaja de expectativas de ERC, quizá convocaría de inmediato.
¿Por qué no ha ido a ver a Oriol Junqueras a la cárcel?
Soy el primer secretario del PSC y no quiero que nadie lea en clave política lo que sería estrictamente un gesto personal. No quiero que nadie piense que me parece bien lo que hizo. Por lo tanto, como no quiero dar lugar a malas interpretaciones pues las intento evitar.
Las encuestas no le dan nada mal al PSC, ¿qué puede contar de los sondeos que tiene?
Dicen que los socialistas catalanes subimos, pero también nos dicen que los movimientos se producen dentro de cada bloque y, por lo tanto, seguiría habiendo una mayoría independentista. Por lo tanto, no sólo espero que me vayan bien las elecciones, sino que permitan un cambio político en Cataluña. Eso todavía no está a la vista.
¿Han derrotado al independentismo?
Hemos derrotado al intento de imponer la independencia por una vía unilateral e ilegal. Eso ha quedado absolutamente claro. Pero, desde luego, los independentistas son muchos, más de dos millones de catalanes. Y las encuestas señalan que sería posible que revalidaran esa mayoría parlamentaria. Por lo tanto, el independentismo no ha desaparecido, pero sí el riesgo de un golpe de mano.
En el Congreso de los Diputados se está viendo un ambiente muy crispado. Uno de los grandes asuntos es el tema de José Luis Ábalos. ¿Qué le parece la polémica? ¿Respalda a su compañero? ¿Qué opina de que Cs y PP se centren en este tema?
Tengo total confianza en el ministro. Es un demócrata, un socialista, que nunca podría en riesgo el interés de España por ningún tipo de planteamiento partidista. No tengo ninguna duda al respecto. El hecho de que la oposición se centre en Venezuela es porque quizá no encuentre motivos en la gestión del Gobierno de España para criticar. Es un poco lamentable porque a veces intentan aparecer como preocupados por el futuro de Venezuela cuando lo único que les preocupa es erosionar al Gobierno. Es bastante triste y da una imagen muy pobre del papel de oposición del PP.
En esta misma sala hace unos años estaba anunciando su dimisión Pedro Sánchez tras el Comité Federal. ¡Cómo ha cambiado su vida y la del PSOE! Hay una Mesa de Diálogo, el PSOE está gobernando en coalición… ¿Qué lecciones se aprenden?
He de decir que me siento muy feliz con la inmensa mayoría de los progresistas de este país y se lo debemos, en gran medida, a Pedro Sánchez, a su tenacidad, a su convicción en sus ideas. Consiguió remontar la moral y la ilusión de mucha gente que se había resignado a largos años de gobiernos de derechas. Consiguió recuperar el liderazgo del partido en unas primarias, ganar una moción de censura y vencer el año pasado cinco elecciones seguidas encabezando el PSOE. Es la esperanza para el diálogo en Cataluña. Estoy muy contento de haber tomados las opciones que en aquel momento tomé.
¿Serán las últimas elecciones catalanas a las que se presente? ¿Se pone fecha de caducidad?
No puedo poner fecha porque no dependen sólo de mí. Dependerá de mi partido, del resultado, de si alcanzo la Presidencia de la Generalitat. Siempre estaré a disposición de mi partido, será la tercera vez que soy candidato. Me gustaría pensar que a la tercera va la vencida, pero siempre haré lo que me pidan.