La pobreza, soledad y, sobre todo, la falta de acceso a la sanidad pública y a los cuidados están provocando que mayores japoneses prefieran vivir en prisión.
Los ancianos homosexuales tienen el doble de posibilidades de vivir solos, muchos carecen de recursos y familia y sienten el dolor pasado de crisis como la del VIH.
El periodista publica 'Las ciudades evanescentes’, un libro sobre miedos, soledades y pandemias esperanzado en que la sociedad salga, de veras, reforzada tras el shock.
Con el aislamiento necesitamos herramientas como teléfonos y videocámaras con conexión a Internet para que las personas moribundas sientan que no están solas.