Tras asistir a todas las ponencias, y créanme que son unas cuantas, de la última edición del congreso gastronómico Madrid Fusión, salí con una idea grabada a fuego: la alta gastronomía sirve, además, para trabajar por conseguir un mundo mejor.
En su último viaje a Haití, el chef José Andrés ofrece un nuevo enfoque sobre el problema alimentario en el mundo. Primero hay que comprender la relación que existe entre los recursos naturales, las tradiciones culturales y la comida del lugar. Lo demás, se resume en una palabra.