Donald Trump le exige al chef José Andrés 10 millones por romper sus lazos laborales
El cocinero José Andrés y el magnate inmobiliario Donald Trump están peleados. Pero bien. Tanto, que han acabado en los tribunales, con el norteamericano pidiéndole al español 10 millones de dólares por romper los lazos empresariales que los unían.
Todo se remonta al pasado 8 de julio, cuando José Andrés, el chef estrella, que tiene una exitosa cadena de restaurantes en Estados Unidos, decidió dejar de trabajar con Trump, por las ofensivas declaraciones contra los inmigrantes que hizo el que aspira a ser candidato republicano a la Presidencia del país. Entre otras cosas, dijo que los hispanos, y sobre todo los mexicano, mandan a través de la frontera con EEUU “drogas” y “violadores”. Luego ha insistido en que "no son de fiar".
Entonces, el cocinero, hispano él mismo y con más de la mitad de su plantilla norteamericana compuesta por latinos, lanzó un comunicado en el que decía: ”Los comentarios recientes y despectivos de Donald Trump sobre los inmigrantes hacen imposible para mí y mi empresa seguir adelante con la exitosa apertura de un restaurante español en la propiedad Trump International en Washington”.
Ahí está el problema. Trump y José Andrés tenían un contrato para que el rey de los fogones tuviera durante 10 años el alquiler del restaurante que se va a abrir en el renovado edificio Old Post Office Pavilion. El contrato roto es sólo uno más de los gestos que la comunidad hispana más potente en EEUU, desde actores a medios de comunicación, han empleado para demostrar su enfado al empresario.
Ahora, la corporación Trump ha anunciado que demanda a José Andrés y le pide 10 millones de dólares. La denuncia se registró el viernes, informa Político. El hijo del magnate, Donald Trump Jr., dice que el español "no tiene derecho" a desdecirse y que las "declaraciones políticas" de su padre no son relevantes en un contrato.
A través de una nota, la empresa de José Andrés dijo que le parecía una denuncia "sorprendente" y "sin mérito" y añade que era "imposible" seguir tras las declaraciones, que suponen una infracción por parte de Trump que no quiso remediar. "A pesar de nuestros intentos de negociar una solución amistosa, en última instancia, nos obligaron a terminar el contrato", sostiene.
José Andrés no es el único cocinero que abandona a Trump. Geoffrey Zakarian también decidió abandonar un proyecto similar y en el proceso puede perder 500.000 dólares de depósito.