Este timo, que se aprovecha del despiste y de la falta de información de la víctima, ya ha afectado a muchos usuarios en algunas plataformas de compraventa online.
Los hechos ocurrieron en mayo de 2008 cuando el condenado conoció al futbolista, que entonces militaba en el Málaga, y se hizo pasar por abogado y asesor de inversiones.