Donald Trump y Kamala Harris se citan el 10-S para su primer debate en televisión

Donald Trump y Kamala Harris se citan el 10-S para su primer debate en televisión

El candidato republicano, reacio al cara a cara si no se celebraba en el canal Fox News, niega que haya "recalibrado" su estrategia tras la irrupción de Tim Walz.

Donald Trump y Kamala Harris, candidatos a las presidenciales de EEUU.Umit Bektas/Elizabeth Frantz

Al final, habrá debate entre Kamala Harris y Donald Trump. El candidato republicano, que hasta ahora ha rechazado todas las propuestas llegadas desde filas demócratas, porque ninguna contemplaba la condición indispensable para aceptarlo, su celebración en el canal ultraderechista de Fox News, ha aceptado este jueves medirse con la candidata del Partido Demócrata. No será en el escenario soñado por el expresidente, pero el próximo 10 de septiembre, los estadounidenses podrán ver el primer cara a cara entre ambos.

El canal ABC News, en un comunicado, ha señalado este jueves que acepta retransmitir el que, por ahora, va a ser el único debate entre Kamala Harris y Donald Trump. Aunque en una campaña electoral abonada a las sorpresas, podrían ser más las ocasiones en las que se vean las caras los dos candidatos. Concretamente dos: 4 de septiembre en Fox News y 25 del mismo mes en el canal NBC. Eso sí, si sale adelante la propuesta lanzada por el candidato del Partido Republicano desde su mansión de Mar-a-Lago, en Florida. 

"Estamos esperando ansiosamente las fechas del 4, 10 y 25 de septiembre porque creo que tenemos que decir las cosas claras", señaló el expresidente estadounidense en su primera aparición pública desde la entrada en campaña del gobernador de Minnesota, Tim Walz, candidato a la vicepresidencia del tándem demócrata. Kamala Harris, por su parte, ha celebrado en redes sociales que Trump haya aceptado "finalmente" este debate, para acto seguido añadir: "Lo estoy deseando". Sin embargo, no ha revelado si su equipo de campaña aceptará las nuevas fechas propuestas desde el lado republicano.

Trump, a quien las encuestas siguen colocando como la opción con más posibilidades de ganar las elecciones presidenciales en Estados Unidos, ha visto estos últimos días como las encuestas empiezan a recoger el 'efecto Kamala Harris'. Desde que Joe Biden retirase su candidatura y diese paso a la vicepresidenta de EEUU, la candidata virtual del Partido Demócrata ha ido recortando poco a poco, una distancia que en el partido consideraban insalvable. Y lo hace, especialmente, en los estados del sur y suroeste del país, una zona que estaba cómodamente del lado republicano, que empiezan a mostrar ciertos nervios.

Trump, que salió reforzado del primer y único debate televisado, aquel que supuso el principio del fin de las aspiraciones de Joe Biden, trata ahora de recuperar la iniciativa de la campaña cargando contra Kamala Harris y su candidato a vicepresidente, Tim Walz. Sin embargo, el republicano ha negado que la elección del 'número dos' de los demócratas le haya hecho "recalibrar la estrategia" de su partido y, en la rueda de prensa convocada de urgencia este jueves en su residencia de Florida, ha querido remarcar que sus mensajes siguen siendo los mismos, ha vuelto a calificar a sus dos rivales de "radicales".

Stephanie Grisham, quien fue portavoz durante una parte de la presidencia de Donald Trump, ha dicho en redes sociales que el anuncio de esta rueda de prensa del candidato republicano, este jueves, es una prueba de que "ha entrado en pánico". "Trump cree que su equipo le está fallando y nadie puede salvarle o defenderle como él mismo. Odia la cobertura que está recibiendo Harris", señaló en el mensaje publicado.

Desde que comenzaron su gira por varios estados clave el martes, el tándem Harris-Walz está congregando a más de 10.000 personas y llenando las instalaciones en las que se presenta, algo que los que conocen a Trump dicen que es una de las métricas en las que más se fija en sus rivales. "Yo he tenido entre diez, veinte y treinta veces más multitudes", respondía Trump este jueves, antes de asegurar que 25.000 personas fueron a un mitin suyo en Michigan y entre 20.000 y 25.000 en Pensilvania. Sin embargo, no ha tenido en cuenta que el primer lugar tenía un aforo para 12.000 personas y el segundo para 7.000.

En cuanto a las donaciones que reciben los partidos, que muchas veces sirven para medir la popularidad de los candidatos, la campaña presidencial del Partido Demócrata recaudó 310 millones de dólares en julio, una cifra impulsada por un alud de donaciones después de la renuncia de Joe Biden y que el mismo partido ha calificado de "récord". El dato es más del doble que los 139 millones de dólares comunicados por la campaña del Partido Republicano durante el mismo mes.