Las claves del nuevo paro de los transportistas: ¿qué reclaman?, ¿cómo te afectará?

La Plataforma para la Defensa del Sector de Transporte de Mercancías por Carretera Nacional e Internacional ha convocado un nuevo paro laboral que comenzará la medianoche de este domingo. El colectivo, conformado principalmente por autónomos y pymes, es el mismo que ya puso en jaque al Gobierno el pasado marzo con un parón de la actividad que duró 20 días.

Ningún otra asociación mayoritaria o representativa del sector ha secundado este paro de momento, en sintonía con lo que sucedió la pasada primavera, cuando la plataforma se quedó sola. Aquellos paros se detuvieron después de que el Gobierno se comprometiera a aprobar una ley de control de costes - que recibió luz verde en agosto- que obliga a los cargadores a fijar un precio justo y suficiente para que a los transportistas les salga a cuenta realizar su trabajo.

Sin embargo, esta plataforma ha vuelto a la carga, tras considerar que no se han respetado sus exigencias y se han abierto nuevas incógnitas. ¿Qué puede suponer para el consumidor? ¿Qué piden exactamente? ¿Qué ha respondido el Gobierno? Estas son las respuestas a todas estas preguntas.

¿Qué reclama la plataforma?

La plataforma demanda al Gobierno mayor control sobre el cumplimiento de la leyes de costes y de carga y descarga, extender su cobertura o establecer multas de hasta 90.000 euros. Sobre el cumplimiento de la ley de costes y de carga y descarga, piden al Gobierno que garantice bajo un acuerdo firmado la colaboración de las correspondientes autoridades.

Concretamente, para el cumplimiento de la ley de costes reclaman la colaboración de la Guardia Civil en carretera, la Inspección de Transportes en las empresas y de Hacienda en las contabilidades; mientras que en la ley de carga y descarga piden la implicación de la Guardia Civil, la Policía Local y la Inspección de Transporte. Por otro lado, solicitan que se extienda la cobertura de la ley de costes a todo tipo de transporte por carretera, incluyendo el furgonetero, ligero, pesado y de áridos.

También reclaman que se incluyan las mismas partidas para todo tipo de transporte en el cálculo de los costes, con gastos como la amortización, financiación y seguros del vehículo, el personal de conducción, los costes fiscales, el combustible, las dietas, el mantenimiento y las reparaciones o los peajes.

Por último, exigen que se dé validez a todas las denuncias de las organizaciones de transportes y de cualquier afectado, que se multe al cargador principal, al cargador contractual y al transportista; establecer sanciones de entre 70.000 y 90.000 euros, y eliminar las exenciones para no poder ser multado.

¿Por qué en este momento?

Si bien el paro indefinido se produce en una convulsa situación económica derivada de la espiral inflacionista que ha aumentado el precio de muchos productos, con el valor los combustibles todavía disparado, lo cierto es que se hace en una época clave.

Es imposible obviar el momento en el que se convoca esta huelga, a las puertas de importantes fechas que marcan la campaña comercial de invierno, como es el Black Friday, pero también con la incógnita de si el paro afectará a la Navidad. Mas no solo eso.

La convocatoria del paro también coincide con otro importante momento a nivel económico, el ciclo de producción del sector agrícola. En este sentido, han sido numerosas las voces de agricultores que han alertado de lo que supondría para los productos perecederos un parón de la actividad. Incluso las principales organizaciones de la cadena alimentaria han reclamado unos servicios mínimos para evitar que se pierdan artículos si acaban paralizados en un almacén.

¿Qué supone en términos económicos?

Aunque es muy complicado obtener una cifra concreta del impacto económico que supondrá el paro de los transportistas, algunos medios han recogido cálculos. Según ha publicado este martes el diario ABC, el país se juega hasta 600 millones cada semana que los transportistas agrupados en la plataforma paren. En el caso de los propios trabajadores, cada día que secunden esta huelga dejarán de percibir unos 700 euros.

Si se echa la vista atrás, a lo sucedido en marzo de este año, solo los primeros cuatro días de huelga supusieron 600 millones de pérdidas a toda la cadena del sector de la alimentación (agricultores y ganaderos, la industria, el transporte y la distribución), según dio a conocer El Mundo.

¿Cómo puede afectar al ciudadano?

El gran temor es que se repitan escenas de desabastecimiento puntuales en el algunos sectores concretos ha vuelto a sobrevolar tras el anuncio de la convocatoria de paro. En este sentido, los principales ámbitos donde el consumidor puede verse afectado por la huelga indefinida es el de la alimentación.

No obstante, también pueden producirse algunos retrasos en la llegada de productos adquiridos a través de plataformas digitales, una cuestión de especial relieve al coincidir con la mencionada campaña navideña.

¿Cuál es la postura del Gobierno?

Desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana se ha instado a los transportistas a que denuncien los incumplimientos que detecten de la ley para que los inspectores puedan realizar su trabajo y, llegado el caso, imponer multas que pueden llegar a los 4.000 euros.

Su titular, Raquel Sánchez, espera que el paro finalmente no se produzca, teniendo en cuenta que, en los últimos meses, el Ministerio ha trabajado “muchísimo” con el sector del transporte y aprobó en agosto un real decreto ley con sus reivindicaciones.

La ministra ha pedido “responsabilidad” a los convocantes del paro, ya que se está ante los primeros meses de aplicación de una normativa que ha cambiado el escenario en el que prestaban sus servicios. Aunque ha reconocido que se tendrá que reforzar los mecanismos de inspección, Raquel Sánchez ha considerado que “estamos en una situación absolutamente diferente a la de hace unos meses”.

En su opinión, han mejorado sustancialmente las condiciones de los transportistas. “No tiene sentido plantear un paro ahora en los términos que se están planteando”, ha reiterado este martes en declaraciones a ‘El programa de Ana Rosa’, al tiempo que ha lamentado que el paro “tampoco va a suponer un arma de presión más, porque ya estamos haciendo todo lo que tenemos que hacer”.

Sánchez ha apelado a la “responsabilidad de este sector ciertamente minoritario”, y ha subrayado que “muchas organizaciones han destacado que no tiene sentido convocar este paro”. La ministra se ha referido al real decreto pactado con el sector hace tres meses y ha indicado que con esta norma “se ha cambiado el escenario, con unas mejores condiciones” para el transportista, si bien ha admitido que “necesitamos más tiempo para desplegar sus efectos”.