¡Feliz Ramadán!
Para nosotros Ramadán es algo más que ayunar, es el mes más especial, más espiritual y más esperado del año, el mes de la clemencia, de la solidaridad con los más necesitados, el mes del perdón, de reconciliación con los demás y con uno mismo. Es el mes de esas noches mágicas de reunión familiar y con los amigos, de las casas abiertas a todo el mundo.
Foto: REUTERS/Adrees Latif
"Y entonces, ¿tú haces el Ramadán?" Quizás sea la primera pregunta que te hace la gente cuando descubren que eres musulmán. Pero, ¿qué es verdaderamente eso de hacer el Ramadán?
Como cada año y durante un mes, estos días los más de 1.500 millones de musulmanes que hay en el mundo (casi dos millones en España) están llamados a celebrar el mes sagrado del Islam. El saludo que más se escuchara durante este mes, y sobre todo en estos primeros días, será sin duda Ramadán kareem!Ramadán Mubarak! ¡Feliz Ramadán!
Es también, según la creencia musulmana, el mes en él que fue revelado el Corán al profeta Muhammad, y lo recuerdan yendo a las mezquitas durante toda la noche del 27 de este mes, Laylat Al Qadr (Noche del Destino), la noche más santa y más especial de todo el año.
Ramadán es el noveno mes del calendario musulmán, calendario lunar, en el que los meses son de veintinueve o de treinta días (hoy, 8 de junio, por ejemplo, es el 02/09/1437). Y por eso va cambiando su fecha de celebración en el calendario occidental/gregoriano. La fiesta de Eid al Fitr marca el fin de este mes, la fiesta de ruptura del ayuno.
Como en prácticamente todas las religiones y creencias, en la musulmana también se practica el ayuno, aunque de una manera más amplia y estrictamente regulada por la jurisprudencia islámica.
Ayunar este mes es el cuarto de los cinco pilares del Islam (El testimonio de fe/Shahada, hacer la Salat/oración, dar el Zakat/ayuda a los pobres, ayunar el Ramadán y peregrinar a la Meca una vez en la vida para aquellos que tengan la posibilidad de hacerlo). En él, los creyentes se abstienen de comer, beber y mantener relaciones sexuales desde el alba hasta la puesta del sol (¿ni siquiera agua? Sí, ni siquiera agua), quedando exentas de ayunar toda persona menor, enferma, viajera, mujer durante el periodo de menstruación o puerperio, así como la embarazada, la lactante y los ancianos débiles.
En este mes, los musulmanes buscamos purificar el cuerpo y el alma, fortalecer la voluntad (en este mes, te das cuenta de lo increíble que es tu cuerpo, tu aguante y tu fuerza) y empatizar con los que no tienen este derecho tan básico: beber y comer.
Para nosotros Ramadán es algo más que ayunar, es el mes más especial, más espiritual y más esperado del año, el mes de la clemencia, de la solidaridad con los más necesitados, el mes del perdón, de reconciliación con los demás y con uno mismo. Es el mes de esas noches mágicas de reunión familiar y con los amigos, de las casas abiertas a todo el mundo. Es esa pausa anual para reflexionar, para reencontrarse, para conocerse mejor a uno mismo y para acercarse más a los demás.
Y por todo esto, a esos vecinos tuyos, amigos y compañeros musulmanes les alegrarías cualquier día de estos con un Ramadan kareem!