Una empleada de Carrefour se lleva 10 unidades de café y 5 Yatekomo y paga 11 productos: un juez da la vuelta por completo a su despido
Estas acciones negligentes pueden ser penadas aunque el importe del hurto "no supere los 5 euros":
Los hurtos en los supermercados son un delito penado incluso para los propios trabajadores. Los tribunales lo avalan para aquellos que comenten estas acciones negligentes, aunque el robo implique un importe de tan solo cinco euros.
Según el medio Confilegal, "son muchas las desapariciones que se producen día a día en los supermercados". "Una realidad ante la que los negocios se blindan para evitar que sus clientes no se lleven más productos de los que han abonado en la caja registradora".
"Estas conductas pueden acabar teniendo consecuencias muy graves. Suponen una ruptura de la buena fe contractual, y con ello el despido procedente", afirma la publicación.
El medio explica el caso de Blanca, una trabajadora que fue "pillada" por su empresa, Carrefour, "llevándose varios productos sin pagar del establecimiento". "La trabajadora se llevó 10 unidades de café, y 5 de Yatekomo Pollo, y en el ticket de compra, aparecieron sólo 11 productos en total. Un suceso que se repitió en diversas ocasiones".
Sin embargo, el Juzgado de lo Social número 9 de Madrid dio la razón a la trabajadora, "declarando improcedente el despido". "Gracias a un recurso de la cadena de supermercados, finalmente, acabo siendo procedente".
"Estos hurtos pueden llegar a suponer una ínfima cantidad de 5 euros. Una trabajadora de supermercados Champions se llevó dos ambientadores del establecimiento sin pagar y fue despedida". Los tribunales fallaron que en este caso el despido fuera improcedente, "no por la cuantía del hurto, sino por la perdida de confianza entre el empleado y la empresa".