La fatal consecuencia de coleccionar vasos reutilizables de los festivales

Hay muchos asistentes de festivales que tratan de llevarse un recuerdo especial. No hace falta comprar algún souvenir o quedarse con la pulsera de recuerdo, algunos deciden llevarse a casa los vasos reutilizables.

De hecho, tal es el interés por coleccionarlos, que hay gente que decide quedarse con el mismo objeto de cada festival al que ha acudido. Pero hay que saber que hay un riesgo detrás.

Estos vasos suelen ser de plástico, para evitar que el cristal pueda convertirse en algo peligroso durante los días de fiesta. Además de que, en el caso de caer, es más resistente que el vidrio.

Como ha pasado durante la Eurocopa 2024, hay algunas organizaciones que deciden implantar un suplemento económico por cada vaso entregado. Una estrategia con la que, tras el evento, hace que mucha gente los devuelva.

Pero la clave está ahí. Un estudio sobre el gas de efecto invernadero en Reino Unido en la industria de la música detalla que las empresas pueden llegar a ahorrar sus emisiones con la presencia de estos vasos.

Si la gente se lleva los vasos a sus casas, el impacto es mayor. Es por ello que, con el objetivo de mitigar los efectos contaminantes, cada vez más empresas tratan de concienciar de que una buena fiesta acaba cuando se devuelven todos los vasos reutilizables entregados.