Encarga a su padre la cena de Navidad y no da crédito al abrir el congelador
La 'víctima' asegura haber aprendido una lección.
Dicen que el periodista no debe ser el protagonista de la noticia y, al menos en esta publicación de The Telegraph se cumple a medias. El diario británico ha pedido a sus redactores que compartan su peor experiencia culinaria en unas Navidades... y más que la periodista, el gran protagonista es su padre.
Amanda James, editora adjunta de la sección de alimentación, recuerda cuando tenía 20 años. Ella era la encargada de cocinar, por lo que también se hacía responsable de las compras. Pero por unos problemas, un año no pudo hacerse cargo de preparar los alimentos y encargo la tarea a su padre.
El señor James se plantó en la tienda "armado con una lista detallada" en la que había todo lo necesario para preparar el menú navideño. Y ciertamente, el hombre encontró todo lo requerido.
El problema esperaba en casa. "Cuando volví tarde en Nochebuena, encontré todo (y me refiero a todo ) metido en el congelador, todavía dentro de las bolsas de la compra. Sí, incluso los After Eights", rememora Amanda, detallando los conocidos bombones de chocolate rellenos de menta.
Fueron momentos de pánico, poco a poco superado con medidas de urgencia. Así, no olvidará que "el pavo fue directamente a un recipiente con agua para descongelarlo y yo traté desesperadamente de salvar las verduras frescas, que ahora estaban completamente congeladas".
No quedó más remedio que ir a casa de la madre, la de la novia de mi hermano e incluso la cocina de mi mejor amigo para encontrar cualquier cosa que pudiéramos usar. "Si algo aprendí, fue esto: no confíes en nadie más para hacer las compras de comida de Navidad", remata.