1.900 interceptores patrullando a 500 kilómetros sobre la Tierra podrían derribar con éxito un número limitado de misiles nucleares rusos recién lanzados, en su "fase de impulso" o los primeros tres minutos de vuelo.
El cohete New Glenn cumplió con éxito este jueves su primera misión de prueba, paso vital para la firma a la hora de entrar en la competición del mercado internacional de satélites.
En una entrevista reciente con Europa Press explicó que aunque no se formarán astronautas en España, ya está entrenando para futuras misiones internacionales, con la posibilidad de unirse algún día al programa Artemis y viajar a la Luna.