No ha habido sorpresas. Lo que sí hay es desafíos: se abre un periodo de continuidad que pide reformas a gritos para frenar el mayor éxodo de la historia reciente del país.
Hija de puertorriqueños y estudiante de la Johns Hopkins, se hizo analista para el servicio de inteligencia de EEUU. En realidad, a quien informaba era a Cuba.
La cifra, muy alta, tiene una lectura política porque el Gobierno y el conjunto del Estado cubano se posicionaron a favor del "sí" con una intensa campaña.