Israel "está privando a la población de sus necesidades más básicas, como alimentos, agua y medicamentos, lo que puede provocar un elevado número de complicaciones de salud y de muertes", señala la organización.
Con cerca de 10.000 empleados y un presupuesto de 50.000 millones de dólares en 2023, la agencia de acción exterior es clave para los principales conflictos. Musk dice que no se puede reformar porque es "una bola de gusanos".
El Gobierno de Netanyahu impide a la agencia de la ONU operar en territorio israelí y a los funcionarios israelíes, tener cualquier contacto con ella. En la práctica supone el bloqueo del organismo más necesario, en el momento de peor crisis humanitaria.
Este domingo entra en vigor la tregua de 60 días pactadas por Tel Aviv y Hamás, un acuerdo precario y desconfiado, por fases, con el que se ponen en pausa 15 meses de asedio a la franja palestina. No arreglará el conflicto de fondo, pero permite vivir.
El Gobierno interino, liderado por islamistas, trata de moderar su imagen y llamar al frente común, mientras acelera los contactos internacionales que le den ayudas y estabilidad. Prioritario: lograr ayuda, levantar sanciones, constitución y elecciones.
La ONU reconoce que, con la financiación internacional que cree posible lograr, sólo podrá acudir en auxilio de 190 millones. La crisis de aportes es profunda.
Un informe de MSF y el IECAH evidencia el fracaso de un planeta con poco corazón ante los 36 conflictos abiertos hoy. Intereses, dobles raseros y olvido que impiden proteger a los civiles y darles respuestas básicas. Un fracaso colectivo.
Washington pidió medidas para agilizar la entrada de bienes a la franja, pero ahora afirma que Tel Aviv está tomando ciertas medidas y no va a congelarle el envío de armas ni a negarle su protección diplomática. Los datos de la ONU le contradicen.
"La guerra en Sudán sigue atormentándonos, desgarrando familias. Quienes huyen comparten las mismas historias de pérdida e incertidumbre. Ya no hay esperanza de que algún día tengamos paz".
Más de 2.000 personas han muerto ya por los ataques de Israel y un millón han tenido que dejar sus casas. 250.000 han escapado a Siria, que lleva desde 2011 en guerra. Los refugios están hacinados, proliferan las enfermedades y no se ve el fin.
"Israel no sólo debe asumir la responsabilidad de sus errores, sino también tomar medidas concretas para garantizar que las FDI no vuelvan a disparar contra el personal de la ONU", le recrimina EEUU.
Las constantes órdenes de evacuación por parte del Ejército de Israel, que ataca la franja desde hace 10 meses, limita su capacidad para llevar ayuda a los palestinos.
La vicepresidenta Harris cree que la palabra "trágico" no empieza ni a describir el ataque israelí en Rafah, donde decenas de civiles han muerto carbonizados tras ataques de Israel sobre tiendas de campañas.