Iván Ferreiro: "Los científicos serán los poetas del futuro"
En sus letras, el compositor Iván Ferreiro habla del cosmos, de los números primos, de biología pura, de metafísica, del Síndrome de Münchhausen, e incluso ha titulado una de sus canciones Bosón de Higgs.
Foto: Wilma Lorenzo.
Iván Ferreiro (Nigrán, 1970) es uno de los compositores que más ha contribuido a popularizar la ciencia. En sus letras habla del cosmos, del Síndrome de Münchhausen, del Bosón de Higgs. Ahora acaba de sacar su quinto álbum de estudio, CASA, quizás el mejor de toda su carrera.
El pasado miércoles presentó el disco en directo en la sala Barts de Barcelona.
Empecemos por la portada del disco, en donde se puede admirar a Laniakea, ese supercúmulo de galaxias al que pertenece nuestra Vía Láctea y que, junto al título, parece toda una declaración de intenciones. ¿Todas estas galaxias son nuestro hogar?
Por lo menos es nuestro vecindario, aunque todavía no tengamos los medios para ver las casas de nuestros vecinos. Yo no sabía que existía Laniakea hasta que una amiga mía, la doctora en neurociencia María Pedraza, preguntó por Twitter por qué ningún músico había hecho una canción sobre Laniakea.
Después de hacer la canción, y a la hora de hacer la portada, me pareció que Laniakea era una idea muy buena, me gusta pensar que lo convierte todo en más universal. No solamente universal a nivel del espacio, sino también a nivel personal. Creo que la portada habla de abrir nuestras cabezas y de que realmente ahí es donde vivimos. Y a mí me encantaría conocer a nuestros vecinos.
En algunas canciones de tus últimos discos haces varias referencias a la inmensidad del cosmos. ¿Tienes la esperanza de que algún día podamos descubrir vida extraterrestre?
La verdad es que no sé si voy a llegar a verlo algún día porque la vida del ser humano no es gran cosa a nivel de tiempo, pero espero que en algún momento lo consigamos. Y me gustaría encontrar, no solamente vida extraterrestre, sino vida inteligente para poder hacerles un par de preguntas. Por ejemplo: ¿tenéis música? ¿Tenéis sentido del humor?
Para mí sería la noticia más importante que podríamos recibir. Creo que estamos muy pendientes de Trump o de Belén Esteban. Cuando, como humanidad, nos demos cuenta de que vivimos en el mismo planeta y de que podemos hacer proyectos más ambiciosos, empezaremos a tomamos en serio lo de buscar la vida afuera. En algún momento espero que alguien invente un motor que ruede más rápido que la velocidad de la luz, porque necesitamos ir bastante más rápido. Para mí sería la gran noticia de toda la historia de la humanidad.
¿Crees que en televisión hay poca ciencia y música en directo y demasiada política y fútbol?
Sin duda. Realmente, la música no existe o no funciona en la tele. Respecto a la ciencia, creo que nadie ha hecho un programa como dios manda. Tenemos el remake de la serie Cosmos de Carl Sagan, que es maravilloso. La vi con mis hijos, y es increíble la forma en la que ellos asumieron y entendieron todo. Se habla de la ciencia como algo muy complicado, pero no hace falta saber fórmulas matemáticas. Bastaría con que te expliquen cuál es el tamaño del universo, qué es el tiempo o qué es el ADN, así, por encima. Creo que nadie se ha tomado en serio hacer un buen programa de ciencia. Cosmos fue lo más emocionante que vi este año, y creo que la divulgación científica debe ser emocionante. A mí me gusta la ciencia por la parte emocional y filosófica que conlleva. Con que le dedicasen el 3% de lo que dedican al fútbol para enseñarnos algo, creo que sería bastante genial.
A lo largo de tu discografía has hablado de números primos, biología pura, metafísica, e incluso has titulado Bosón de Higgs una de tus canciones. ¿De dónde sacas la influencia para introducir todos estos términos científicos en las letras de tus canciones?
Leo mucha ciencia ficción, me ayuda a acercarme a ciertos conceptos. Realmente, para construir canciones es perfecto, ya que son conceptos muy grandes y potentes. Creo que todos los que oímos música sentimos que nuestras emociones son grandes y potentes. No hay nada más bonito que comparar cualquier cosa con el tamaño del universo y las cosas que nos ofrece. Tanto las cosas grandes como las pequeñas, como un átomo o un electrón. Supongo que llevamos muchos siglos hablando de dios y buscando explicaciones que nos han permitido adentrarnos en nosotros mismos y tener una espiritualidad. Considero que la verdadera espiritualidad ahora va a estar en la ciencia. Creo que los científicos van a ser los poetas del futuro.
Dos de las primeras canciones que pudimos escuchar del nuevo disco, Pensamiento circular y Casa, ahora vivo aquí, rezuman sentimientos de nostalgia y morriña. ¿Tiene algo que ver tu regreso a las tierras gallegas de Val Miñor, donde has grabado parte de este disco?
Creo que Galicia está muy dentro de mis canciones. Lo curioso de la gente que nos movemos mucho es que al final tenemos muchas casas. Cuando estás en Galicia, echas de menos el resto, y cuando estás por ahí, echas de menos Galicia. Es como si tuviese la morriña insertada en el corazón, como una especie de microchip. Pero si tuviese que elegir un centro del universo sería Gondomar, me parce el sitio adecuado. Se supone que dios se echó a descansar en las rías gallegas.
A raíz de la muerte de Leonard Cohen, día triste para la música, he leído un artículo de la agencia SINC que dice que las canciones tristes nos hacen sentir mejor porque generamos más dopamina...
Totalmente de acuerdo. La gente dice que este disco es más luminoso, pero yo creo que todos mis discos son luminosos porque enfrentar la tristeza desde las canciones hace que la dopamina se nos dispare, y esto parece incluso hermoso. Las cosas tristes son horribles en sí mismas pero, cuando vienen en una canción, te das cuenta de que puedes mirarlas a la cara y convivir con ellas. Hay algo realmente mágico en escuchar y tocar música. Así como es bueno hacer deporte, creo que deberíamos usar también la música como terapia, y nuestros hijos deberían saber que tienen la herramienta de las canciones increíbles antes de usar Valium.
En este disco se cuelan dos personajes de cómic, Galactus y el Doctor Manhattan de Marvel y Watchmen respectivamente. ¿Sigue despierta tu afición por la ciencia ficción?
Mi pasión por los cómics y la ciencia ficción empieza con Spiderman y Star Wars. Le he dado muy duro a la ciencia ficción. Creo que Asimov y Philip K. Dick son maravillosos. En este disco está muy presente la ciencia ficción, hay mucho de Robert J. Sawyer o de Poul Anderson. Los personajes de Galactus y el Doctor Manhattan son muy filosóficos, tienen que ver con el tejido de la realidad y de cómo es el mundo.
Para acabar, ¿eres más de la serie Breaking Bad o The Big Bang Theory?
Soy más de The Big Bang Theory. Me gusta mucho Breaking Bad pero después del final no pude ver otras series donde hubiese demasiada maldad. Ahora, en esta temporada, estoy buscando mucho más la luz. En la película La juventud, de Sorrentino, hay una escena en la que el actor se viste de Hitler y le dice a Harvey Keitel que, entre el horror y el deseo, él se queda con el deseo. Yo creo que estoy en la misma situación. Y la verdad es que, cuando vi los dos primeros capítulos de The Big Bang Theory, me enamoré de la serie.