El fruto seco más saludable se muere en España
La situación para los agricultores es límite.
El campo español atraviesa uno de los momentos más críticos que se recuerdan. El lastre de la enorme sequía que lleva arrastrando España durante meses ha perjudicado de forma dramática a los agricultores españoles, que en muchos casos se encuentran al borde del abismo debido a las pérdidas incalculables de sus cosechas.
Esta vez, la provincia perjudicada es Almería, y es que, si su producción de cereales cayó un 90%, la cosecha de la almendra tampoco es mucho más alentadora, ya que se estima que sufrirá una caída de un 40%, una situación agravada por la caída de los precios en un 25%.
Asaja Almería ha sido la encargada de llevar a cabo estos cálculos y desde la empresa aseguran que las dos principales adversidades a las que han tenido que enfrentarse durante esta campaña -helada y sequía en Vélez y Alto Almanzora- han sido un auténtico Everest contra el que poco han podido hacer.
Menos producción y a menor precio
Pero esta situación no es nueva sino que llueve sobre mojado, ya que las malas dos últimas cosechas de almendra obligaban a los agricultores a que esta tuviera que ser muy buena, algo que nada tiene que ver con la realidad.
Desde Asaja han insistido en que las condiciones climáticas, con fuertes heladas -características en la zona almeriense- constituyen el mayor de los peligros para la almendra. De hecho han recordado el episodio de fuertes heladas que se produjo en el norte de la provincia con hasta -5ºC en el mes de abril.
“En otras campañas, los buenos precios de la almendra han compensado la falta de producción, pero como no mejore la situación, será un año muy difícil para este sector”, se lamenta Miguel Ángel Serrano, Secretario Técnico de ASAJA Almería.