Un politólogo señala las 3 opciones de Ucrania para el fin de la guerra
Las garantías de seguridad que reclama Kiev no convencen a aliados clave como EEUU, pero hay alternativas que pueden llevar a una solución duradera del conflicto.
Ni la Administración de Joe Biden ni la de Donald Trump están dispuestas a conceder a Ucrania la membresía en la OTAN como garantía de seguridad, aunque hay alternativas sobre la mesa. La postura de Estados Unidos es clave por su peso en la Alianza Atlántica y es un no con el que Kiev tiene que aprender a convivir, al menos en el tiempo inmediato.
Es lo que señala Samuel Charap, presidente del área de política rusa en la corporación RAND, un analista de referencia en el mundo de la seguridad y la defensa, en un análisis en Foreign Affairs.
El politólogo señaló que la entrada de Ucrania en la OTAN requeriría la aprobación de los 32 estados miembros, un proceso que podría llevar meses, incluso en el mejor de los casos, y dependería de que Kiev implemente numerosas reformas no relacionadas con la guerra en curso.
En cambio, el artículo sugiere enfoques alternativos para proteger a Ucrania. A lo largo de la historia, Estados Unidos ha ofrecido compromisos bilaterales de seguridad a aliados y socios en situaciones posteriores a conflictos, en particular a Corea del Sur después de la Guerra de Corea y a Israel después de la Guerra del Yom Kippur de 1973.
"Estos enfoques, que han fomentado largos períodos de relativa estabilidad y paz, podrían servir como modelos para futuras negociaciones con Ucrania", escribe Charap.
Otra forma de garantía de seguridad podría provenir de la posible adhesión de Ucrania a la UE. En virtud de las disposiciones de asistencia mutua de la UE, los Estados miembros están obligados a proporcionar ayuda y apoyo a un país víctima de una agresión armada, utilizando todos los medios disponibles.
Charap destacó la importancia de armar a Ucrania para garantizar una paz duradera. "Si Kiev confía en sus garantías de seguridad, podrá centrarse en la recuperación económica y la democracia en lugar de convertirse en un estado fortaleza", escribió.
Además, Charap destacó la necesidad de que las agresiones rusas tengan consecuencias sostenidas para disuadir futuras invasiones. Occidente podría mantener ciertas sanciones y controles a las exportaciones como medidas a largo plazo, o hasta que Rusia se retire por completo de Ucrania.
Si bien el presidente ruso, Vladimir Putin, puede declarar la victoria una vez que termine el combate activo, Charap sostiene que el mundo no debe percibir que Rusia ha escapado a la responsabilidad por sus acciones.
En noviembre, el New York Times, citando fuentes propias, informó de que Ucrania prioriza las garantías de seguridad sobre la recuperación de territorios ocupados por Rusia, a pesar de las negaciones públicas de concesiones territoriales.
Sin embargo, el Ministerio de Asuntos Exteriores de Ucrania, en una declaración con motivo del 30º aniversario del Memorándum de Budapest, reiteró su rechazo a cualquier alternativa a la membresía en la OTAN, calificando el memorándum como una "amarga lección" para el país.