Ucrania se rinde ante la aplastante evidencia sobre Rusia
Después de la tibia cumbre internacional de paz para poner fin a la guerra.
Sensaciones diplomáticas e internacionales malas tras la gran cita internacional de este fin de semana que tenía una resolución de la invasión rusa como gran objetivo. La Cumbre de Paz para Ucrania celebrada en Suiza, que presentaba como gran hándicap la ausencia de Rusia, finalizó ayer con un triunfo para el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, quien logró que el apoyo a su causa no fuera solo europeo, sino global, a pesar de algunas discrepancias. Pero esas discrepancias han instaurado un clima de que las posibilidades de una paz cercana se han reducido.
Junto a los líderes de la UE y de la OTAN, habituales aliados de Zelenski en grandes reuniones, en esta ocasión también hubo presidentes y jefes de Estado de países latinoamericanos, africanos y asiáticos, algo que el líder ucraniano deseaba para mostrar que la guerra contra Rusia no es sólo un problema continental.
"Hemos contado con la participación de presidentes y representantes a distintos niveles de 101 países y organizaciones [acudieron finalmente 57 representantes de ese listado], es un éxito, y Rusia hizo todo lo que pudo para que algunos no vinieran, pero les agradezco que hayan mostrado su independencia", afirmó el presidente ucraniano en la rueda de prensa que concedió al final de la cumbre.
La frase del jefe de la diplomacia ucrania que hace saltar las alarmas
La clave de esta suerte de golpe de realidad la ha dejado el ministro de Asuntos Exteriores ucraniano, Dimitro Kuleba, en medio de un tenso debate de la comunidad internacional ante la situación ventajosa de Rusia en el campo de batalla -a pesar de que no han logrado cumplir con ninguna expectativa de la operación militar especial anunciada por Putin, sí dominan buena parte del Donbás en Donetsk y Lugansk y áreas de Jersón o Zaporiyia-.
Se trata de una respuesta entre líneas a la posición de algunos países en un bloque más favorable a los postulados de Putin; principalmente de las argumentaciones de Brasil, India y Sudáfrica que apuntan a que Rusia nunca cederá ante la reclamación de una retirada completa de Ucrania.
Así, el jefe de la diplomacia ucraniana ha dejado una pequeña concesión, en una afirmación que ha hecho saltar algunas alarmas. "Por supuesto que entendemos que llegará un momento en el que será necesario hablar con Rusia", aseguró Kuleba, según recoge el medio neerlandés AD.