Ofensiva "a gran escala" al norte de Gaza, con al menos 120 muertos, según Hamás
La ONU alerta de que la franja está "al borde de la catástrofe" y reclama un alto el fuego. Uno de sus campos de refugiados ha sido atacado, mientras Macron llega a la zona a rebajar las hostilidades.
Gaza amanece sin esperanza. Ni hay alto el fuego ni llega la ayuda humanitaria en el volumen que sus 2,3 millones de ciudadanos necesitan. Otra noche más, la franja ha sufrido los bombardeos de Israel. En esta ocasión, su ejército afirma que atacó un objetivo de Hamás en un campo de refugiados que, según el Ministerio de Salud del enclave palestino, mató o hirió a decenas de personas, informa Reuters.
Un portavoz de las IDF dijo esta mañana que el ataque tuvo como objetivo un terreno de operaciones de Hamás en el campamento de Al-Shati, en Gaza, que linda con la costa mediterránea. Este portavoz no proporcionó más detalles.
En una declaración en Facebook, el portavoz del Ministerio de Salud de Gaza, Ashraf Al-Qudra, afirmó que entre las víctimas del ataque israelí se encontraban niños y mujeres. Tampoco proporcionó más detalles. Los medios locales informan por ahora de al menos cinco fallecidos en este enclave, coordinado por la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA).
La agencia palestina de noticias WAFA informó más tarde de que la madrugada se ha saldado con 120 los palestinos muertos, en total, en la franja. Ha sido especialmente grave la destrucción de un edificio residencial en la ciudad de Rafah (al sur), situada cerca de la frontera con Egipto, que se ha saldado con al menos 48 muertos y decenas de heridos.
La noche ha sido especialmente dura en el norte de la franja, en una de las peores madrugadas para los civiles que aún se encuentran en esta parte del enclave, porque no han podido moverse o resisten en sus casas. "Las fuerzas de Defensa de Israel atacaron más de 400 objetivos terroristas", indicó un portavoz del Ejército israelí a EFE, al asegurar que las tropas realizaron "una operación a gran escala".
Crímenes y urgencias
Por su parte, el alto comisionado de la ONU para los derechos humanos, Volker Türk, subrayó que tanto israelíes como palestinos han cometido violaciones de la ley internacional en el conflicto iniciado el 7 de octubre, y pidió un alto el fuego humanitario.
"Demasiadas vidas de civiles, muchos de ellos niños, se han perdido en ambos lados como consecuencia de las hostilidades, y a menos que algo cambie, en los próximos días veremos más personas al borde de la muerte por los bombardeos continuos", advirtió Türk anoche en un comunicado.
Türk destacó en este sentido la situación en Gaza, "al borde de la catástrofe" tras 16 días de bloqueo y con graves carencias de agua, electricidad, medicamentos, alimentos y otras necesidades básicas.
"Las noticias sobre hacinamiento y brotes de enfermedades son profundamente preocupantes, especialmente dado que muchos hospitales están destruidos o dañados", subrayó el alto comisionado austriaco, recordando que la cifra de fallecidos en Gaza supera ya los 5.000, entre ellos 2.000 niños.
Según recordó el alto comisionado, unas 1.400 personas, entre ellas unos 800 niños, están atrapadas en los escombros en Gaza, donde decenas de miles de casas han quedado destruidas.
"Las acciones emprendidas por Israel para cortar todo acceso a bienes y servicios esenciales son una forma de castigo colectivo que viola la ley internacional", denunció Türk.
Por otro lado, el alto comisionado recordó los 1.300 israelíes fallecidos por ataques de grupos armados palestinos, principalmente en la jornada del 7 de octubre, e insistió en que "todos los civiles capturados por esos grupos armados palestinos deben ser liberados inmediata e incondicionalmente". "La toma de rehenes está prohibida por la ley internacional", subrayó Türk.
Agregó que los palestinos tienen que detener el lanzamiento indiscriminado de cohetes, pero también los israelíes deben evitar el uso de armas explosivas en áreas densamente pobladas, que tan sólo el pasado fin de semana causaron la muerte de cerca de un millar de civiles gazatíes "algunos en hospitales, mezquitas o escuelas".
"Las partes del conflicto deben tomar medidas inmediatas para cumplir con sus obligaciones en virtud del derecho internacional", resumió Türk, quien pidió también a terceros Estados con influencia sobre israelíes y palestinos que presionen para que las partes beligerantes respeten las normas humanitarias.
"No se puede hablar de dobles estándares en materia de derechos humanos, los que posee un grupo humano no son mejores que los de otro y se aplican igualmente a todos", insistió el austríaco.
El alto comisionado mencionó por otra parte que la ayuda humanitaria que desde el fin de semana está entrando en Gaza a través del paso de Rafah, en la frontera con Egipto, "es sólo una gota en el océano de necesidades que tienen los gazatíes".
"Si no llega más ayuda en forma de combustible, medicinas, alimentos y agua a Gaza, muchas más personas en la franja morirán de hambre, sed y falta de cuidados médicos", advirtió.
Movimientos diplomáticos con Tel Aviv
Esta madrugada y esta mañana se han producido movimientos diplomáticos importantes en Israel. Por un lado, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, llamó este lunes a su homólogo israelí, Benjamín Netanyahu, para hablar sobre las dos rehenes liberadas anoche por el grupo islamista Hamás y sobre el apoyo de su país a la defensa de Israel, dijo la Casa Blanca en un comunicado.
El mandatario estadounidense también hizo hincapié en la necesidad de asegurar el envío de ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, y detalló los esfuerzos de su país por evitar que el conflicto se contagie a otras regiones.
Ambos líderes se comprometieron a volver a hablar durante los próximos días.
El secretario de Defensa estadounidense, Lloyd Austin, también habló con su homólogo israelí, Yoav Gallant, para informarle sobre las acciones de su oficina para evitar una escalada de la violencia en Oriente Medio.
Según el periódico The New York Times, sin embargo, la llamada de Austin tenía un objetivo concreto: avisar a las autoridades de Israel de los riesgos de acometer una invasión terrestre de la Franja de Gaza.
El medio, que cita a fuentes gubernamentales, afirmó este lunes que Estados Unidos teme que los israelíes no cuentan con un plan claro y factible para llevar a cabo el ataque, que hace poco más de una semana parecía inminente.
Este lunes, un portavoz de la Casa Blanca dijo a la prensa que Estados Unidos respetará las decisiones de Israel sobre cuándo y cómo llevará a cabo su posible invasión, después de que varios medios aseguraran que el Gobierno estadounidense ha aconsejado al país que retrase la acción militar con la esperanza de ganar tiempo para las negociaciones sobre rehenes.
Y por otro lado, ya está en Israel el presidente de Francia, Emmanuel Macron, con el objetivo de rebajar la tensión. El mandatario francés se reunirá con su par israelí, Isaac Herzog, así como con el primer ministro, Benjamín Netanyahu, líderes de la oposición y familiares de las víctimas del ataque de Hamás, para mostrarles su solidaridad.
Macron ya se encuentra en Tel Aviv y su agenda "comenzará en las próximas horas", indicó a EFE un portavoz del Ministerio de Exteriores de Israel, sin dar más detalles.
Emmanuel Macron pretende “continuar la movilización para evitar una escalada peligrosa en la región”, en particular en la frontera norte de Israel, con el poderoso movimiento chií libanés Hizbulá, apoyado por Irán, indica la prensa francesa, citando fuentes oficiales.
Además, el jefe de Estado abogará por el bienestar y la seguridad de los civiles y propondrá relanzar un “auténtico proceso de paz” para la creación de un Estado palestino, a cambio del compromiso de los países de la región con “la seguridad de Israel”, según los medios franceses.
No se descarta que Macron se reúna con el presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abás, quien gobierna áreas limitadas de Cisjordania ocupada, así como con otros líderes de países árabes.
Según el Gobierno israelí, 22 franceses fueron asesinados y otros tres continúan desaparecidos tras el sorpresivo ataque de Hamás contra Israel el 7 de octubre.