Salah Abdeslam en su juicio en Bruselas por los atentados de París: "No tengo miedo, confío en Alá"
El único superviviente de los comandos yihadistas que mataron a 130 personas en la capital gala en 2015 se sienta por primera vez en el banquillo.
El único miembro aún vivo de los comandos yihadistas que el 13 de noviembre de 2015 atentaron en París, Salah Abdeslam, ha llegado este lunes al Palacio de Justicia de Bruselas para su primer juicio, por un tiroteo con la policía en el momento de su captura en marzo de 2016.
Trasladado de madrugada desde una prisión en los alrededores de París bajo fuerte escolta policial, el francés de origen marroquí, de 29 años, ha llegado a Bruselas para un juicio que debe durar hasta el viernes, ha informado a la AFP una fuente cercana al caso.
El juicio ha comenzado poco antes de las 9 de la mañana (la misma hora en la España peninsular), cuatro horas después de que el yihadista saliera de la prisión de Fleury-Mérogis, al sur de París, en un convoy policial escoltado por unidades de élite, ha indicado a la citada agencia una fuente próxima al caso.
A pesar de la expectación sobre si Abdeslam rompería el silencio que ha mantenido desde hace dos años, el acusado ha decidido no responder a ninguna pregunta y ha rechazado estar presente en el momento en que el juez lea los cargos en su contra. "No deseo responder a ninguna pregunta (...). Se me acusa, aquí estoy. Mi silencio no me hace culpable ni criminal, es mi defensa", ha dicho el terrorista.
El acusado ha dicho constatar que "los musulmanes son juzgados y tratados de la peor manera, sin piedad" y se ha encomendado a Alá ante el tribunal. "No tengo miedo de usted, ni de sus aliados. Tengo confianza en Alá", ha dicho.
"El derecho al silencio es un derecho importante y, por ahora, nada indica que será la posición del acusado", ha dicho ante la prensa poco antes del inicio de la audiencia el presidente del tribunal, Luc Hennar, quien ha advertido de que "al mínimo problema" evacuará la sala.
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El preámbulo del macrojuicio
Aunque este proceso juzgará el tiroteo ocurrido en la localidad de Forest en marzo de 2016, se ve como un preámbulo del que tendrá lugar en Francia por los atentados de París, que dejaron 130 muertos.
Las autoridades han puesto en marcha un importante dispositivo de seguridad tanto dentro como alrededor del Palacio de Justicia. Un helicóptero sobrevuela el imponente edificio del siglo XIX con un proyector y militares armados se encuentran en las inmediaciones.
Abdeslam creció y se radicalizó en la popular localidad bruselense de Molenbeek, acabó formando parte de una célula yihadista implicada en al menos tres sonoras operaciones en los últimos años.
Los atentados del 13 de noviembre de 2015 en París, del 22 de marzo de 2016 en Bruselas (32 muertos) y el malogrado ataque en un tren entre Ámsterdam y París en agosto de 2015 responden "quizás a una única operación" de la organización Estado Islámico, según la fiscalía federal belga.
Los hechos por los que se juzgará a Abdeslam entre el lunes y el viernes, con un día de descanso el miércoles, se remontan al 15 de marzo de 2016. Aquel día investigadores franceses y belgas fueron sorprendidos por disparos durante un registro rutinario en uno de los refugios de la célula en Forest. Tres policías resultaron heridos y un yihadista de origen argelino de 35 años, Mohamed Belkaid, falleció al enfrentarse con los agentes para cubrir la huida de Abdeslam y de un cómplice, Sofiane Ayari, un tunecino de 24 años, a quien la justicia también juzgará a partir del lunes en Bruselas.
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El detonante del 22 de marzo
Ambos yihadistas fueron detenidos tres días después, el 18 de marzo, en Molenbeek, una detención que, según los investigadores, representa el detonante de los atentados del 22 de marzo, cuando tres atacantes suicidas se hicieron explotar en el aeropuerto y en el metro de la capital belga.
V-Europe, una asociación de víctimas creada en Bélgica tras esos ataques, acaba de reclamar ser parte civil en el juicio. Para su abogado, Guillaume Lys, "el tiroteo de la calle Dries [de Forest] se inscribe en una continuidad entre el 13 de noviembre y el 22 de marzo" y "las víctimas de los atentados necesitan y tienen el derecho a tener respuestas".
La defensa de los dos acusados podría acoger de mal grado esta constitución como parte civil de última hora, aunque varias fuentes relacionadas con el caso excluyen cualquier nuevo aplazamiento. La audiencia, que debía celebrarse inicialmente a mediados de diciembre ante el tribunal correccional de Bruselas, se aplazó para dejar tiempo a Sven Mary, el nuevo abogado de Abdeslam, para preparar su defensa. Este prestigioso penalista belga le asistió en un primer momento justo después de su detención, pero tiró la toalla siete meses después criticando la incomprensible actitud de su cliente.
Ayari y Abdeslam serán juzgados por "intento de asesinato de varios policías" y "tenencia de armas prohibidas", todo ello "en un contexto terrorista". Se enfrentan a hasta 40 años de prisión.
Abdeslam también deberá responder ante la justicia francesa por los atentados del 13 de noviembre de 2015, en un proceso cuya fecha todavía no ha sido fijada. A partir del lunes, Abdeslam llegará cada día al tribunal belga desde la prisión de Vendin-le-Vieil, en el norte de Francia, donde tendrá las mismas condiciones de detención que en la cárcel cercana a París en la que se encuentra en régimen de aislamiento bajo videovigilancia las 24 horas del día, desde su ingreso a finales de abril de 2016.