Los Mossos investigan unas pintadas contra Puigdemont en el consulado de Bélgica
"Refugio de delincuentes" o "cómplice del separatismo", se lee en las paredes del edificio.
Los Mossos d'Esquadra han abierto una investigación para identificar al autor o autores de unas pintadas en la entrada del edificio donde tiene su sede el consulado de Bélgica en Barcelona, con frases como "Puigdemont, a prisión" o "Bélgica: refugio de delincuentes".
Las pintadas, entre ellas también "Bégica cómplice del separatismo", están situadas en la fachada del edificio de la Gran Vía en el que tiene su sede el consulado de Bruselas en Barcelona, entre las calles Bruc y Girona.
Pese a que las pintadas tienen la firma de La Falange e incluso remiten a @lafalange, la cuenta de Twitter de esta formación ultra no las ha reivindicado por el momento.
Según han informado a Efe fuentes policiales, los Mossos d'Esquadra, al tener conocimiento de estas pintadas, se han puesto en contacto con el consulado y, paralelamente, han abierto una investigación para identificar a su autor o autores.
Con normalidad
En declaraciones a Efe, el cónsul de Bélgica en Barcelona, Didier Verwaerde, ha afirmado que no se sienten amenazados por estas pintadas y ha ironizado con que son la "tentativa de hacer la decoración de la entrada" del edificio de la Gran Vía donde tienen sus dependencias. Verwaerde ha afirmado que las pintadas se limitan únicamente a la entrada del edificio y que han podido acceder con normalidad al consulado.
Los Mossos d'Esquadra han acudido ya al lugar para hacer una inspección ocular de las pintadas y el cónsul ha avanzado que "muy probablemente" acabarán presentado una denuncia, ya que considera que es un hecho que se tiene que investigar.
Por la información que tiene el cónsul, se trata de la primera vez que en el edificio aparecen pintadas ofensivas como estas.
El cónsul ha quitado hierro al asunto y ha indicado que ahora están concentrados en el homenaje a las víctimas de los atentados del 17-A en Barcelona, ya que hay varios ciudadanos belgas, familiares de víctimas, que acudirán a la capital catalana a partir del jueves para participar en los actos convocados un año después del ataque.
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