Un desorbitado impuesto de la nueva ley animal pone en jaque las granjas de cerdos

El sector ganadero porcino se encuentra en jaque económico ante una medida que sobrevuela a las explotaciones en intensivo y que se deriva de un decreto ley. Se trata de las críticas de organizaciones del ramo como COAG o Asaja ante los requisitos y medidas que fija la nueva norma.

Así lo recoge el medio especializado Autónomos y Emprendedores en una información en la que pone el foco sobre el posible impacto del Real Decreto 159/2023, de los que las citadas organizaciones apuntan a que generará un sobrecoste económico de la friolera de una media de 300.000 euros por explotación. 

Fundamentalmente, el objetivo de la norma es favorecer las condiciones de vida de los animales y por ello aboca a ampliaciones del espacio de estos. Por ejemplo, según la mencionada noticia, en el caso de los cerdos de engorde tendrá que pasar de 0,65 a 0,74 metros cuadrados por animal. El de los lechones -las crías- aumentará de 0,2 a 0,24 metros cuadros.

"Hay una adaptación muy concreta y costosa, que es en las salas de parto"

En este sentido, se han pronunciado en declaraciones al citado medio voces del sector como Jaume Bernis, miembro de la ejecutiva de COAG, quien detalla que dependerá de los casos. Por ejemplo, "si es una granja de madres, el coste medio es más alto que si es sólo de engorde. Porque lo que se nos exige es generar más metros cuadrados para mantener la misma cantidad de animales".

También pone el foco en que "en una granja de madres hay una adaptación muy concreta y costosa, que es en las salas de parto, donde, más allá de tener que generar más espacio, habremos de colocar parideras adecuadas a la normativa de parto libre. Esto es, que a partir del primero o segundo día de parto las madres puedan estar libres".

Con todo, Bernis resuelve que "el coste medio aproximado de la nueva adaptación es de unos 300.000 euros por explotación, aunque depende de la granja".