El líder del PSC, Pere Navarro, defiende que España ganaría "energía e imagen" con la abdicación del rey
Las críticas de la oposición y de algunas voces de su propio partido no han achicado al líder del PSC, Pere Navarro, que el pasado día 20 de febrero generó la polémica al pedir la abdicación del rey y que este lunes se ha reafirmado en sus palabras al defender que España ganaría "energía y otra imagen" con la abdicación del rey de cara a acometer las reformas necesarias para fortalecer la democracia y avanzar hacia un Estado federal.
En sendas entrevistas este lunes a Catalunya Radio y Antena3 recogidas por Europa Press, ha sostenido que "hace falta mucha energía y mucha fuerza" para acometer las reformas necesarias en España, y que quien la puede representar mejor como jefe del Estado es el Príncipe.
¿PUEDE ABDICAR EL REY? ¿QUÉ HABRÍA QUE HACER?
El dirigente socialista, que ha deseado una pronta recuperación al monarca tras su última operación, ha remarcado que el relevo al frente de la Monarquía es un aspecto más de los cambios que requiere el Estado. Navarro, que ha reconocido haber recibido mucho más apoyo de la calle que de sus compañeros del PSOE, ha argumentado que España está "en una situación muy grave que requiere todas las energías".
Preguntado sobre por qué un republicano defiende la continuidad de la Monarquía, ha defendido la continuidad de la Corona porque no es momento de abrir otra división entre monárquicos y republicanos.
POLÉMICA
Las palabras de Navarro generaron las críticas de su propio partido y de la oposición. El PSOE emitió un comunicado minutos después sus declaraciones en el que mostraba su total rechazo a la petición de abdicación. Elena Valenciano insistió en que el PSOE “no comparte en absoluto” la opinión de Navarro. El exvicepresidente socialista Alfonso Guerra criticó que Navarro desviase la atención del debate de la nación, que se celebrara aquellos días, y Emiliano García- Page, secretario general del partido en Castilla-La Mancha, aseguró que no eran "maneras de plantear las cosas”.
En el PP, Esteban González Pons calificó lo ocurrido de "grave problema de organización" y la alcaldesa de Madrid aseguró que las palabras de Navarro eran "lamentables".