príncipe felipe
Lo que Felipe VI podría aprender de Isabel II
Impresiona cómo esa bisabuela con cara de vinagre, que se niega a abdicar en un hijo considerado por muchos como demasiado político como para reinar, ha convencido a una mayoría abrumadora de que no merece la pena considerar siquiera otro sistema político.
Soy de la generación del nuevo rey
Me he criado en una monarquía parlamentaria, he viajado por todo el mundo por mi trabajo y tengo sellos en mi pasaporte de repúblicas, monarquías, monarquías parlamentarias, 'democracias' a la venezolana, y he visto miseria y desigualdad en grandes repúblicas tanto como en monarquías de distinta fórmula. Pretender que una presidencia de la república es más dinámica y realista para el día a día de una nación, es tergiversar la realidad.
El rey ciudadano
La decisión del rey anticipa un futuro propicio para España e Iberoamérica, porque la monarquía es garantía de continuidad en la historia y ancla el presente para cimentar un futuro mejor, alejándonos de ambiciones coyunturales, oportunistas y de experimentos peligrosos e inciertos.
¿En qué medida fue una sorpresa la abdicación del rey?
"¿Abdicará el rey Juan Carlos en 2014?" Desde el anuncio de Rajoy de la comparecencia hasta la confirmación de la operación se realizaron 308 operaciones de inversión en este contrato. Al principio no sabíamos que el anuncio sería el de la abdicación... pero poco a poco la información fluía.
La actuación del rey no podrá ser cuestionada legalmente
Cuando aún no había tomada la decisión de pasar a un segundo plano, el rey habría comentado con sigilo que él "sólo abdicaría en caso de que su futuro quedara atado y bien atado". Con el trabajo silencioso de varios ministerios, el asesoramiento de destacados juristas y los cerebros grises de la Zarzuela, el proyecto de ley orgánica de Abdicación ya está a punto.
El rey que pidió perdón se va
Nadie pone en duda que, a sus 46 años, Felipe de Borbón tiene formación y experiencia suficiente para asumir el cargo para el que lleva preparándose desde niño. Pero la clave está en algo que no queda directamente bajo su control: en abrir una nueva etapa de esperanza, lo que más que una necesidad, es una exigencia para cualquier institución que quiera trascender.
Tiempo de consulta
Se equivocarán una vez más los grandes partidos si cierran nuevamente en falso la decisión sobre la Jefatura del Estado. En el siglo XXI sólo una consulta popular, un referéndum, puede legitimar al futuro Jefe del Estado. Las crisis institucionales se resuelven con más Democracia, y no con menos.