La AEMET alerta de dos sucesos extraordinarios para esta semana
Hay que estar muy alerta.
Tras la ola de calor que España ha vivido hasta hace tan solo unos días, las temperaturas disminuyen, pero tampoco se puede decir que llegue la calma. La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha señalado que durante la semana tendrán lugar dos sucesos a tener en cuenta.
Se trata de la posibilidad de que se produzcan tormentas secas que podrían ir acompañadas de rayos. Y ello es bastante peligroso en esta época del año, ya que esos rayos podrían provocar incendios.
En concreto, la AEMET ha advertido en su cuenta oficial de Twitter de que nos encontramos en una “semana con riesgo de incendios muy alto o extremo en buena parte del país debido a las altas temperaturas, baja humedad, escasez de precipitaciones y una vegetación muy seca a estas alturas del verano. Incrementa el riesgo la posibilidad de tormentas secas, con caída de rayos”.
Igualmente, habrá “riesgo de incendios muy alto o extremo también en áreas de Canarias”, ha indicado la Agencia Estatal de Meteorología.
Los rayos secos pueden provocar incendios forestales incluso en condiciones más húmedas
Precisamente, esta semana se ha publicado en la revista científica Geophysical Research Letters un estudio acerca de los incendios provocados por rayos. Y la conclusión es que los rayos secos pueden provocar incendios forestales incluso en condiciones más húmedas.
Tal y como recoge Europa Press, hasta ahora se pensaba que estos rayos que impactan contra el suelo cuando llueve poco o nada sólo suponían un peligro de incendio forestal si se producían con menos de 2,5 mm de lluvia al día, pero el nuevo estudio, dirigido por la Universidad Estatal de Washington sobre los incendios forestales provocados por rayos en el oeste de Estados Unidos, descubrió que los impactos causaban incendios forestales a pesar de una precipitación de hasta 7,7 mm.
Aunque la cantidad de lluvia sigue siendo escasa, una estimación más precisa podría ayudar a los equipos de intervención a detectar antes los incendios, sobre todo los denominados ‘remanentes’, que pueden permanecer latentes durante varios días antes de convertirse en incendios en toda regla.
Según Dmitri Kalashnikov, doctorando de la Facultad de Medio Ambiente de la WSU y autor principal del estudio, “las cantidades de lluvia que hemos cuantificado ayudarán a comprender mejor cuánto puede llover y aun así suponer un riesgo de incendio”.
Los investigadores analizaron los datos de más de 4.600 incendios de origen natural recopilados por el Centro Nacional Interagencias de Incendios en todo el Oeste entre 2015 y 2020. A partir de los datos de la Red Nacional de Detección de Rayos, cotejaron 3.726 de ellos con los rayos que probablemente los provocaron.