Los piojos destapan las autopistas migratorias
Un estudio ha descubierto cómo los humanos han ido viajando alrededor de todo el planeta.
Los piojos son unos pequeños insectos que van saltando por las cabezas de los humanos en busca de alimento. Son tan pequeños como las semillas del sésamo y causan una gran picazón en el cuero cabelludo.
Sin embargo, como informa National Geographic, su estudio puede arrojar luz a muchos aspectos de la evolución humana. Por eso, un grupo de científicos publicó en noviembre en la revista Plos One una investigación en la que analizaron la variación genética de 274 de estos animales provenientes de 25 zonas geográficas de todo el planeta.
Este estudio concluyó que hay dos grupos genéticos principales, que han ido evolucionando al mismo que tiempo que los humanos a lo largo de toda la Historia. Uno de ellos procede de África y Asia y el otro de Europa. Y ambas familias no se han mezclado casi nunca, a excepción de algunas veces en el continente americano.
"La principal conclusión es que hemos hallado la presencia de dos grupos genéticos distintos, con pruebas de hibridación de épocas recientes, la mayoría de ellos en América, lo que interpretamos como una señal de contacto entre los piojos descendientes de los nativos americanos y piojos de poblaciones llegadas de Europa", asegura Marina Ascunce, autora del estudio, al medio citado anteriormente.
Así pues, los investigadores han averiguado que los piojos de América Central y Mongolia están estrechamente relacionados. Y eso significa que los asiáticos que fueron al estrecho de Bering hace 20.000 años llevaron un nuevo linaje de piojos.