Libertad... pero no en los centros de salud: Ayuso prohíbe las pancartas o recogida de firmas a favor de la sanidad pública
El gobierno autonómico dicta una resolución para que no se haga un "uso político" de los centros de atención primaria
Ayuso aviva el enfrentamiento contra el sector sanitario. 72 horas después de la masiva manifestación en favor de la sanidad pública, la tercera que llena las calles de la capital en apenas cuatro meses, la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha dictado este miércoles una resolución para garantizar "un uso adecuado" de los centros de salud tras "detectarse" que en ellos se efectúan recogida de firmas y otras actividades distintas a la atención sanitaria en el marco de la huelga de médicos y pediatras de Atención Primaria que arrancó el pasado 21 de noviembre.
En concreto, desde el departamento que dirige Enrique Ruiz Escudero, se encomienda a los directores de los centros de salud "la supervisión y adopción de las medidas necesarias" para garantizar el adecuado uso de las instalaciones. Incluso, la propia resolución amenaza con llevar a cabo "una serie de visitas a distintos centros de Atención Primaria" para asegurarse de que se cumplen con estas normas.
Además de cualquier recogida de firmas, la norma también impide la instalación de cartelería o reparto de folletos no autorizados o cualquier otra acción que no tenga carácter asistencial o de promoción de la salud.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, el consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Enrique López, ha subrayado que la orden busca mantener "el decoro" en los centros de salud para que los ciudadanos sean atendidos en un ambiente de "orden, limpieza, seguridad y confort".
"Soberbia" y "desprecio" de Ayuso
La reacción de los médicos y pediatras de atención primaria no se ha hecho esperar. La secretaria general del sindicato médico Amyts, Ángela Hernández, ha dicho que el Gobierno de la Comunidad de Madrid "habla de libertad pero aplica la represión" con esta medida. De momento, ha pedido a los profesionales "que no se pongan en peligro ni se sometan al riesgo de que se les abra un expediente". "Hablaremos con la población y veremos cómo recogerlas fuera", ha dicho la secretaria.
La oposición también ha salido en tromba a criticar la medida. El portavoz del PSOE en la Asamblea de Madrid, Juan Lobato, ha criticado la "soberbia" y el "desprecio" de Ayuso al prohibir que se recojan firmas en contra de su gestión en centros de salud y Mónica García, de Más Madrid, ve a la presidenta de la Comunidad de Madrid "cada vez más nerviosa por tapar su chapuza" con su "versión censora".