El gobernador de Florida, DeSantis, es el que más posibilidades tiene para la nominación republicana con el 13,3 % de intención de voto, seguido de Ramaswamy (6 %) y Haley (5,9 %).
El expresidente de EEUU no afronta ahora un tema menor, sino que se le persigue por supuestos esfuerzos para revertir el resultado de las elecciones de 2020. O sea, por doblarle el brazo a la democracia. Palabras mayores... y lo que le queda.
Todos se llevaron documentos que no debían a sus casas u oficinas, pero no fueron tantos, los devolvieron en cuanto se dieron cuenta y no trataron de ocultarlos y de obstruir a la justicia, como la Fiscalía cree que hizo el expresidente republicano.
El que fuera vicepresidente con el magnate quiere pelear la presidencia en 2024. Tiene una potente base ideológica, arraigada en el Tea Party, pero le falta el carisma del ex. Un político no muy brillante que ha sabido resistir, con contactos y donantes.
Competirá con su antiguo amigo, el expresidente Donald Trump, de quien se ha distanciado recientemente, aunque un día estuvo cerca de ser su vicepresidente.
El que fuera números dos de Trump trató de evitar a toda costa esta declaración, siendo testigo clave de lo ocurrido. Es la primera vez en la historia moderna que un vicepresidente se ve obligado a testificar sobre el presidente con el que sirvió.
Recauda dinero, promueve su campaña y trata de reducir el caso a un espectáculo. Por ahora le va bien: ha logrado cuatro millones en un día y gana en las encuestas hasta a Biden.
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha solicitado documentos y testimonios relacionados con el intento fallido de anular las elecciones de 2020
Los conservadores norteamericanos pasan el duelo tras las 'midterms', que dejan peores resultados de lo esperado, y abren ya el melón de la sucesión del expresidente.
El último vicepresidente de EEUU publica un nuevo libro y cuenta cómo le marcó haberse negado a seguir el mandato de Trump para deslegitimar la victoria de Biden
Trump en el centro de la conspiración para dar un golpe en EEUU y los ultraderechistas de Proud Boys calculando los pasos desde mucho antes: el día de furia que no triunfó.
La residencia del Observatorio Naval ha acogido desde 1977 a todos los vicepresidentes de los Estados Unidos y todos ellos han añadido sus toques personales.