Europa no se puede quedar atrás
A veces me da la sensación de que se tiende a la autocontemplación: Europa se está apagando a sí misma a base de regodearse en sus propias contradicciones y problemas locales, perdiendo así su sentido de la perspectiva. Europa debería abrirse al exterior y utilizar la crisis como una oportunidad para cambiar el modo de hacer las cosas.