Esta palabra de cuatro letras asusta a los perros
La recoge hasta la Real Academia Española (RAE).
El perro es el fiel escudero del hombre. Este animal de cuatro patas aporta un cariño incondicional a sus dueños desde tiempos inmemoriales, de ahí que también se les haya bautizado como el mejor amigo del hombre.
A diferencia de otros, como los gatos, a los que siempre se les ha considerado más arriscos, los canes disfrutan de la compañía de sus "progenitores". Un ejemplo muy significativo de esta relación tan estrecha es Hachiko, un akita considerado perro más fiel del mundo ya que permaneció durante varios años a su dueño fallecido, día tras día, en el mismo lugar de la estación de Shibuya, en Japón.
Tan conmemorativa y emotiva es la historia que, desde hace más de 100 años, una estatua de Hachiko se encuentra a la salida de esta concurrida estación y se considera todo un símbolo en la capital nipona.
A parte de Hachiko, son millones los canes que hay repartidos a lo largo de todo el planeta y muchas las curiosidades que se encierran entre su comportamiento amable y simpático, en la mayoría de los casos. Una de ellas es su nombre coloquial y el por qué les ahuyenta tanto.
Y es que una de las palabras que más odian los perros es "tuso", en caso de ser perro, y "tusa", en caso de ser perra. Así lo recoge la Real Academia Española (RAE), que seña que el empleo de ambos términos, masculino y femenino, como interjecciones, sirven para llamar o espantar a los perros.
Asimismo, también hay otra interjección para ahuyentar a los gatos. Se trata de ¡sape!, término que a diferencia del anterior, no lo recoge la RAE.