Un país en el flanco oriental de la OTAN activa las alarmas por los planes de invasión rusa: ya se produjeron simulacros
En junio, el ministro de Defensa alemán advirtió que Europa "debe estar preparada para la guerra en 2029".
Finlandia teme a un posible ataque ruso dentro de sus fronteras. De acuerdo a un "supuesto" informe del Gobierno finlandés, la OTAN tiene la intención de atacar el país nórdico en el futuro, pero "sin especificar un plazo".
Según una publicación del periódico finés Italehti, a la que ha tenido acceso el medio inglés Newsweek, Rusia "habría ensayado un ataque contra Noruega, Finlandia y los países bálticos durante su ejercicio militar en Zapad en 2017, y desde entonces Moscú no ha abandonado un plan de invasión que quiere llevar a cabo cuando la guerra en Ucrania llegue a su fin".
En una entrevista en el medio inglés, fuentes de las Fuerzas de Defensa de Finlandia (FDF) afirmaron que estos ensayos "son normales para cualquier cuerpo armado". "No hay amenaza militar inmediata para el país", aseguraron.
¿Por qué es importante?
De acuerdo a la publicación del digital británico, "los líderes mundiales han avisado que la agresión del presidente ruso no se detendrá con la invasión de Ucrania".
Según el artículo 5 de la carta de la OTAN, "un ataque contra un miembro desencadenaría una respuesta colectiva". De hecho, en junio, el ministro de defensa alemán, Boris Pistorius, advirtió que Europa "debe estar lista para la guerra en 2029".
"En marzo, la OTAN llevó a cabo el ejercicio Respuesta Nórdica 2024, dirigido por el vicealmirante estadounidense Douglas Perry, en el que 20.000 soldados fueron transferidos al norte de Noruega y a la Laponia finlandesa", recuerda la publicación.
El informe citado por Iltalehti reitera que la invasión de Ucrania "ha demostrado que Rusia está preparada para asumir riesgos significativos independientemente de las pérdidas". Así, el Kremlin "podría planear un ataque simultáneo en diferentes zonas del flanco oriental de la alianza".
"El pensamiento de seguridad de Rusia refleja la búsqueda de profundidad estratégica y el deseo de crear una única zona de amortiguamiento en Europa, desde el Ártico a través del Mar Báltico y el Mar Negro hasta el Mediterráneo", concluye el informe.
"Es probable", continua, "que continúen las especulaciones sobre que Rusia tiene un plan a largo plazo para invadir la OTAN después de Ucrania", pero la alianza ha advertido que la amenaza real son los llamados "ataques híbridos". Estas campañas de desestabilización incluyen los cortes energéticos y de comunicaciones en el mar Báltico.