Un enemigo de China mira a España para defenderse
La colaboración podría cambiar el mapa del poder militar en el sureste asiático.
Navantia, la sociedad pública española que se dedica a la construcción naval, tanto civil como militar, ha presentado hace poco al Gobierno de Filipinas un proyecto de rearme que, de firmarse y llevarse a cabo, podría cambiar el mapa que retrata el poder militar en el sureste asiático. Con una inversión proyectada de 1.700 millones de dólares, el plan incluye la creación de una armada de submarinos.
El Director Comercial de Navantia para Asia, Guillermo Zamarripa, en una rueda de prensa resumida en el portal Philippines Daily Inquirer y recogida en la web Zona Militar, aseguró que la oferta completa de Navantia no sólo contempla la entrega de dos submarinos avanzados de la serie S-80 Isaac Peral, sino también la transferencia de conocimientos necesarias para que los buques se puedan fabricar y mantener en Filipinas. Además, contempla la formación de tripulaciones en un centro de entrenamiento construido en colaboración con la Armada Española.
El anuncio de Navantia cobra especial relevancia por la creciente hostilidad que existe entre Filipinas y China, país con el que mantiene disputas territoriales. La falta de una flota submarina ha dejado al Gobierno filipino en una posición vulnerable respecto al chino y la decisión de estudiar una asociación con España supondría un cambio más que significativo en cuanto a la estrategia de defensa del país asiático.
De llevarse acabo, la colaboración entre España y Filipinas daría un giro importante en cuanto a las alianzas estratégicas de la región. Mientras la Armada de Filipinas se prepara para adentrarse en la era submarina, que la Armada Española pueda encargarse de la formación y el entrenamiento supone un valioso respaldo táctico y operativo.
Según Zamarripa, aunque la primera hornada de militares filipinos formados tendría lugar en España, las posteriores se llevarían a cabo en una instalaciones especializadas construidas en Ormoc, una ciudad de la provincia de Leyte, al sur de Filipinas, que cumple con los requisitos que necesita Navantia para que el proyecto se haga realidad: protección natural ante condiciones climáticas extremas, bajo riesgo sísmico, su cercanía al aeropuerto Daniel Z. Romualdez de Tacloban y las ventajas logísticas de su puerto.