Rusia ordena levantar de inmediato la prohibición de despliegue de misiles nucleares
El ministro de Defensa, Serguei Lavrov, anunció que Moscú dejará atrás el acuerdo que existía hasta ahora con Estados Unidos.
Rusia dará un nuevo paso en las próximas semanas en lo que respecta a su política de armas nucleares y el acuerdo vigente que todavía prevalece para con Estados Unidos, conocido como la moratoria sobre el despliegue de misiles INF (nucleares de alcance intermedio). Según informó el ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, su país abandonará el acuerdo, que ya fue abandonado por EEUU en 2019 bajo el mandato de Donald Trump.
"Hoy en día es evidente que, por ejemplo, nuestra moratoria sobre el despliegue de misiles INF prácticamente ya no es viable y tendrá que ser abandonada", fueron las palabras de Lavrov a la agencia rusa RIA Novosti.
Con estas declaraciones se confirma lo que era un secreto a voces, y se pone fin de manera definitiva al acuerdo de control de armas que estaba en vigor desde la Guerra Fría, cuando EEUU y Rusia en 1987, representados por Ronald Reagan y Mijail Gorbachov, decidieron prohibir el desarrollo y utilización de misiles balísticos y de crucero nucleares y convencionales lanzados desde tierra con un alcance de entre 300 y 3.400 millas.
La retirada de EEUU del Tratado INF en 2019 estuvo motivada por la acusación de Washington a Rusia acerca de que Moscú había violado el acuerdo al desarrollar el SSC-8, un misil de crucero lanzado desde tierra 9M729.
Por su parte, Rusia se abrió a una 'tregua' "hasta que se desplieguen misiles de clases similares fabricados en Estados Unidos", que es lo que actualmente se conoce como su moratoria INF. Sin embargo y tras el devenir de los acontecimientos, Lavrov argumentó que EEUU "ignoró arrogantemente las advertencias de Rusia y China y, en la práctica, pasó a desplegar armas de esta clase en varias regiones del mundo".
Sistemas que vulneran el Tratado por parte de ambos
Además, Moscú alega que fue EEUU quien violó en primera instancia el Tratado INF con el sistema Aegis Ashore, sistema de defensa antimisiles balísticos desplegado en Europa y con capacidad de enviar misiles de crucero y de larga distancia sobre Rusia, algo que fue negado por Washington, que afirmó que dicho sistema "solo es capaz de lanzar misiles interceptores defensivos", algo permitido por el tratado.
Posteriormente, concretamente el pasado mes de abril, EEUU reconoció haber desplegado el sistema de misiles Mid-Range Capability (MRC) en Filipinas, capaz de disparar misiles de crucero Tomahawk con alcance de 1.600 km, lo que habría supuesto una violación del acuerdo si aún hubiese estado en vigor.
Ante esto, Lavrov se mostró franco y anunció "el abandono de las autorrestricciones unilaterales introducidas por Rusia tras la retirada de Estados Unidos del Tratado INF es inevitable" y confirmó el desarrollo del misil balístico de alcance intermedio 'Oreshnik', utilizado supuestamente en un ataque contra Ucrania en el mes de noviembre.
El desarrollo de estos misiles, según Putin, se producirá de forma masiva, gracias entre otros factores, a un aliado importantísimo para Rusia como es Alexander Lukashenko, presidente de Bielorrusia, que ya confirmó que permitirá que sean desplegados en sus fronteras.
Diálogo nulo entre EEUU y Rusia
Con todos estos condicionantes sobre la mesa, para Rusia, actualmente es inviable mantener ningún tipo de diálogo con EEUU, debido entre otros motivos al sentimiento "antirruso extremo" existente por parte de Washington.
"Hasta que los estadounidenses abandonen su actual postura antirrusa, no llevaremos a cabo ninguna negociación con ellos sobre el control de armamentos", afirmó Lavrov, quien además recordó que el Nuevo Tratado START (último tratado sobre armas nucleares), que expira en febrero de 2026, todavía está en vigor, pero no está claro qué sucederá dentro de poco más de un año.