Europa le destruye la vida a un amigo de Putin influyente en España
Todos hemos comprado alguna vez en uno de sus negocios.
Mikhail Fridman es uno de los oligarcas rusos más destacados tras lograr ganar miles de millones de euros en la banca, el petróleo y el comercio minorista. Sin embargo, según su abogado, ya habría que comenzar a hablar en pasado de su buena situación económica en pasado.
El equipo legal de Fridman ha afirmado que su vida ha sido “destruida” por las sanciones de la Unión Europea para condenar la invasión militar de Ucrania que Vladímir Putin ordenó el 24 de febrero de 2022.
Tal y como recoge El Economista, estas palabras han tenido lugar en una audiencia en el Tribunal General de la Unión Europea. La acusación de la UE asegura que el Mikhail Fridman es un aliado de Putin, y que por ello ha respaldado y se ha beneficiado de la agresión a Ucrania (que curiosamente es el país natal de Fridman).
“Esta situación tiene un impacto muy negativo en su vida y no se basa en nada”, ha subrayado el abogado Thierry Marembert, quien señala que la evidencia de la UE es “no confiable” y cuenta con “muchas palabras vacías”.
Es el antiguo dueño de Dia
Dentro de los numerosos movimientos empresariales de este oligarca, hay uno que le ha llevado a tener gran influencia en España. Se trata de la compra de la cadena de supermercados Dia (que ya no posee).
La operación de Dia fue una de las muchas que Fridman realizó tras mudarse al Reino Unido para establecer una firma de capital privado con la que invertir en multitud de empresas de todo el mundo. Precisamente, ese entramado minorista es el que para la Unión Europea evidencia la relación directa del empresario con Vladímir Putin.
Además, Fridman es el cofundador de Alfa Group, la matriz que controla el banco privado más grande de Rusia. A través de la entidad bancaria, el oligarca tendría estrechos vínculos con el Kremlin. Y esa buena relación, según la UE, es la que le habría permitido a Mikhail Fridman “adquirir propiedades estatales como recompensa del Alfa Group por su lealtad al régimen político”.
De esta forma, el empresario es una de las casi 1.800 personas y entidades rusas que la Unión Europea ha sancionado desde que Rusia se anexionó Crimea en 2014 y, posteriormente, inició la guerra de Ucrania.
Mikhail Fridman se encuentra en estos momentos en un proceso de apelación ante el Tribunal General de la Unión Europea que, por el momento, no ha resultado ventajoso para sus intereses.