A Putin no le tiembla el pulso tras pedir Polonia un arsenal nuclear
Moscú sigue atentamente el debate abierto por el presidente polaco. Muy atentamente.
La tensión y el miedo a un horror nuclear no ha dejado de escalar en los últimos años, primero con la invasión rusa sobre Ucrania y, más recientemente, con la serie de ataques entre Israel e Irán que han puesto patas arriba el tablero de la política global y ha desembocado en numerosas llamadas a la calma y a la contención por parte de la comunidad internacional.
Con todo, la tensión sigue siendo evidente en el flanco ucraniano, puesto que si hay un actor nuclear clave inmerso en un conflicto bélico que ha cruzado muchas líneas rojas del derecho internacional y las mínimas garantías en una guerra, esa es Rusia. La reacción de otros países de la región tampoco contribuye a una desescalada. Sobre todo, tras la última propuesta de Polonia.
El presidente polaco, Andrzej Duda, ha puesto sobre la mesa la posibilidad de que aliados -lógicamente con capacidad nuclear- escojan su país para albergar armas nucleares. Lo que en la práctica supondría disponer de misiles que amenazasen a Rusia muy cerca de su territorio. Cuestión que no ha gustado en Moscú.
A Putin no le tiembla el pulso en sus claras advertencias
En este sentido, Rusia advirtió este jueves contra el emplazamiento de armas nucleares de la OTAN en Polonia y aseguró que, de concretarse este, se convertirán en un objetivo prioritario en la planificación militar rusa. Es decir, Putin lo tendrá en su punto de mira.
"La expansión de la práctica de la OTAN de misiones nucleares conjuntas (...) es puramente desestabilizadora. De hecho, es amenazante. Eso ya sin hablar del emplazamiento permanente [de armas nucleares]", afirmó el viceministro de Exteriores ruso, Serguéi Riabkov, citado por la agencia oficial TASS.
El diplomático se refería a las declaraciones del mandatario polaco que el pasado lunes afirmó que su país está "dispuesto a aceptar armas nucleares" de países aliados en su territorio. Según el viceministro ruso, el debate sobre el emplazamiento de armas nucleares en Polonia es una "historia con desarrollo", que Moscú sigue atentamente.
"Los políticos que ahora, por sus propias razones, debaten con entusiasmo este plan en Polonia y en el extranjero, deben comprender: los cambios no añadirán seguridad a Polonia, y las correspondientes instalaciones se convertirán en objetivos. Y estarán en primer plano de nuestra planificación militar", advirtió.