El líder prorruso Medvedchuk se ofrece para un intercambio de prisioneros con residentes de Mariúpol
Este político y empresario es íntimo de Putin y fue capturado por Ucrania el pasado martes.
El político y empresario ucraniano prorruso Víctor Medvedchuk, capturado por las tropas de Kiev la semana pasada, se ha ofrecido como protagonista de un intercambio de rehenes. En concreto, el oligarca, íntimo de Putin, se ha ofrecido a su amigo y a Zelenski para que organicen su libertad a cambio de la de residentes de Mariúpol, ciudad que lleva casi dos meses asediada por Rusia.
En una grabación publicada con los servicios de seguridad ucranianos, Medvedchuk se dirige directamente a los dos presidentes “con una propuesta para intercambiarme por defensores y residentes de Mariúpol, bloqueada y sin acceso seguro a través de corredores humanitarios”.
Esta figura opositora de Zelenski estaba en arresto domiciliario con anterioridad a la guerra por “alta traición”, como decretó un juez ucraniano. Sin embargo, el mismo día que comenzó la invasión rusa aprovechó para fugarse hasta el pasado martes. Fue el propio líder ucraniano quien confirmó la captura de Medvedchuk, que aparecía esposado y con ropa militar.
Víctor Medvedchuk no es solo cercano al mandatatorio ruso; Putin es padrino de una de sus hijas y en ocasiones ambos se han ido de vacaciones juntos o han quedado para ver carreras de Fórmula 1.
Por ello, su captura por parte de tropas ucranianas fue vista como una victoria nacional al hacerse con un objetivo y alguien tan cercano al régimen de Putin. “Bravo”, celebraba el pasado martes Zelenski en un mensaje de Telegram.
Según Bussiness Insider, Medvedchuk era la opción preferente de Rusia para poner en el poder en Ucrania de haber tomado Kiev, algo que el Kremlin ha desmentido.
Dos británicos se ofrecen por él
Aparte de Medvedchuk, dos ciudadanos de Reino Unido apresados por el ejército ruso han aparecido en la televisión estatal Rossiya 24 pidiendo ser intercambiados por Medvedchuk. Se trata de Shaun Pinner y Aiden Aslin, el primero con pasado en las fuerzas británicas.
En dos grabaciones distintas, ambos por separado, han pedido la intermediación del primer ministro, Boris Johson, para que puedan regresar a casa sanos y salvos, incluyendo en la operación a Medvedchuk, cuenta la cadena Sky News.
Las familias de ambos se han apresurado a aparece en los medios para asegurar que no son combatientes voluntarios, ni mercenarios, sino que sirven de forma legal en las Fuerzas Armadas ucranianas, por lo que deben ser tratados como prisioneros de guerra tal y como marca la Convención de Ginebra.
La mujer del activista prorruso, Oksana Marchenko, ha denunciado que estaría sufriendo torturas para sonsacarle información sobre los planes de Rusia. Incluso, se dirigió a Boris Johnson para solicitar ese intercambio por ciudadanos británicos: “Señor primer ministro, usted tiene una gran influencia sobre el presidente Zelenski. Si no es usted indiferente al destino de estas personas, ayude a su familia y amigos para que vuelvan, ayúdeme a que vuelva Víctor”.