Ribera ve "muy difícil" obligar a los ciudadanos a reducir el consumo de gas
La ministra de Transición Ecológica dice que las familias pueden estar "tranquilas" porque no habrá cortes de suministro.
La vicepresidenta tercera del Gobierno español y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, cree “muy difícil” que se pueda obligar a los consumidores a reducir el consumo de gas, más allá de realizar recomendaciones generalizadas.
En una entrevista ofrecida por ETB, Ribera ha señalado que parece que el otoño-invierno va a ser “complicado”, pero ha asegurado que las familias pueden estar “tranquilas” porque no va a haber problemas de suministro de gas. “Todo apunta que no tiene por qué haber ningún tipo de problema respecto al suministro en nuestros hogares ni en nuestra industria”, ha añadido.
En este sentido, ha recordado que España “está bien posicionada y no depende de las materias primas energéticas rusas en la misma medida en que sí lo hacen otros estados miembros de la Unión Europea”.
No obstante, ha explicado que si afecta en los precios y “en la necesidad de ser solidarios con quienes lo están pasando mal, siempre dejando claro que las familias pueden estar tranquilas”. “La economía productiva y los sectores industriales en España no tienen un problema de seguridad de suministro”, ha insistido.
La ministra se ha referido a la propuesta de la Comisión Europea para reducir el consumo de gas, para señalar que “es muy difícil hacer obligatoria” una restricción del consumo, pero sí considera que se puede “velar porque las recomendaciones sean aplicables de la manera más generalizada posible”.
A su juicio, “es importante”, por ejemplo, “jugar con los termostatos, manteniendo una temperatura de confort, que no sea excesivamente fría o calurosa en invierno”.
Sobre la posibilidad de que se tengan que dilatar en el tiempo los compromisos climáticos al intentar reducir la UE su dependencia de los gasoductos rusos, sobre todo en lo que se refiere a Alemania, Teresa Ribera considera que el planteamiento que se hace es que haya “flexibilidad en el muy corto plazo”.
De esta forma, según ha precisado, no se renuncia a los compromisos a medio y largo plazo. Sin embargo, ha advertido de que “hay que tener mucho cuidado para que esa respuesta excepcional” no sea “para quedarse”.
Por último, ha asegurado que las relaciones del Gobierno con las compañías eléctricas en estos momentos “son correctas, profesionalmente sólidas y francas respecto a aquellas cosas” que al Ejecutivo le parecen “manifiestamente mejorables”.
A preguntas de si las eléctricas no han estado a la altura, Ribera ha respondido que “ha habido veces que han estado más a la altura que esta”. “Choca mucho la presentación de los resultados trimestrales, con unos incrementos muy importantes de los beneficios declarados, mientras que hemos vivido un incremento de los costes energéticos para la población en general y para la industria”, ha remarcado.