¿Qué impacto tiene la automatización en la economía?
El auge de las tecnologías y la revolución tecnológica está provocando una serie de cambios en la economía. Con la penetración de la digitalización, la automatización es un hecho cada vez más presente. Por otro lado, muchos son los que temen, innecesariamente, a esta automatización.
Como era de esperar, el fuerte crecimiento que está experimentando el uso de las plataformas digitales y todo aquello que, con la digitalización, se ha adaptado a estos nuevos formatos 3.0, está revolucionando, a su vez, el empleo tal y como lo conocemos. La era digital está cambiando la forma de actuar en las empresas.
La era digital trae un diverso conjunto de nuevos puestos de trabajo que, a priori, no se consideraban en las empresas. Los community managers, los media planners, los directores tecnológicos, los CRM, entre otros, son un conjunto de figuras que, antaño, no existían.
Y es que, aunque uno piense que la digitalización es una verdadera catástrofe para la economía, pues se considera que la era digital y la aparición de la robótica provocará un holocausto en materia de destrucción de empleo, esto es una afirmación que no es del todo cierta. La digitalización no destruye empleo, cualifica, aún más, el empleo.
La robótica y la digitalización traen consigo la aparición de nuevas figuras en la empresa. Es decir, el impacto que está teniendo la era digital en la economía y las empresas es más un impacto a nivel de capacitación, que de destrucción. Con la aparición de los nuevos formatos de trabajo, los integrantes de una compañía precisan de una formación constante que les capacite para el correcto desempeño de sus funciones.
Como digo, esto está provocando que el empleo del futuro, sea un empleo de mayor cualificación, un empleo más especializado y enfocado en determinadas funciones. Aquellos empleos que están desapareciendo son los que precisan de mano de obra poco cualificada y poco especializada. Es decir, en otras palabras, aquel empleo del que se puede prescindir.
Y es que, aunque pueda sonar ofensivo, estos empleos que están siendo suplantados por máquinas y robots, también son aquellos en los que más desgaste físico se produce. Por ello, cuando hablamos de que la robótica mejora la calidad de vida, a lo que realmente se refiere es que estos puestos de gran desgaste físico son hechos por robots, dejando para los humanos, aquellos empleos cualificados y de mayor especialización.
Por ello, no debemos alterarnos, ni atacarnos, cuando oímos la palabra robot o, esos titulares que alarman con una hipotética destrucción de empleo. Al igual que el ser humano evoluciona, el empleo lo hace con el y, por ello, nace la era digital y la robotización. Una consecuencia de una serie de exigencias para mejorar las condiciones de vida que, a día de hoy, se poseen.
Además, como hemos comentado, la aparición de estas nuevas tecnologías precisa de una serie de capacitaciones y formaciones de manera continuara; las cuales, transfieren a los empleados de una compañía, una serie de conocimientos que nutren y benefician a los propios empleados de la misma. En añadido, el gran avance que se produce, día a día, hace que esta formación sea cada vez más constante, lo que genera una mayor adquisición de nuevas habilidades para los empleados.
Como digo, y para concluir, estamos ante un cambio que, como ha ocurrido a lo largo de la historia, viene para mejorar las condiciones de vida. El estado de bienestar, tal y como lo conocemos, está cambiando y así, los hábitos de las personas también lo hacen. Pese a alarmarnos por esta automatización, cada vez son más las empresas tecnológicas que lideran los diversos sectores industriales. Cada vez son más los usuarios que estas poseen y que hacen un uso diario de ellas.
Aunque no lo creamos, la aparición de Amazon, de Netflix, de Ali Ba Ba o Bla Bla Car, han provocado una serie de cambios en los hábitos humanos que han mejorado contrastablemente la vida de las personas. Por ello, temer a la automatización es un error; debemos afrontarla con optimismo y prepararnos para el cambio, adoptando y formándonos en aquellas habilidades que el mercado laboral precisa.
La automatización y la era digital han llegado para quedarse. Cada vez son más las empresas, como hemos comentado, que hacen uso de las nuevas tecnologías para interactuar con el mercado y su oferta. Por ello, cuanto antes asumamos los nuevos roles que se nos plantean en la sociedad del futuro, antes nos adaptaremos a ellos. Como decía Darwin, "no sobrevivirá el más fuerte e inteligente, sino aquel que más se adapte a los cambios".