Marruecos pide pena de muerte para los presuntos asesinos de dos turistas nórdicas que hacían montañismo
Entre los arrestados hay un ciudadano con doble nacionalidad, española y suiza.
La Fiscalía de Marruecos ha presentado cargos castigados con penas de muerte contra 15 personas de un total de 22 detenidos supuestamente implicados en el asesinato terrorista, el pasado 17 de diciembre, de dos turistas escandinavas cerca de la ciudad de Marrakech, en el sur de Marruecos.
El Ministerio Público remitió a los 15 acusados al juez de instrucción en el Tribunal de Apelación de Salé, cerca de Rabat y especializado en casos de terrorismo, para que se avance en la investigación. Según pudo constatar Efe, los 15 detenidos, todos marroquíes, fueron trasladados a la sede de la corte en tres furgonetas de la Oficina Central de Investigación Judicial (BCIJ), especializada en la lucha antiterrorista, bajo grandes medidas de seguridad.
La Fiscalía precisó en un comunicado que estos arrestados están acusados de "atentar de forma premeditada contra la vida de personas", "cometer un crimen mediante actos bárbaros", "formar una organización para preparar y cometer actos terroristas", y de incitación y apología del terrorismo. Asimismo, señaló que otros siete detenidos por posible implicación en el asesinato de las dos turistas, entre ellos un ciudadano de doble nacionalidad suiza y española, están bajo custodia policial y serán remitidos a la Justicia en los próximos días.
Pese a que las administraciones públicas cierran en Marruecos en domingo, el Tribunal de Apelación de Salé abrió sus puertas de forma excepcional para interrogar a los presuntos terroristas ante la presencia de varios medios de comunicación locales e internacionales.
El único detenido extranjero, el hispano-suizo, fue arrestado el sábado en Marrakech por el BCIJ por supuestamente ayudar a algunos de los arrestados en este caso a utilizar nuevas técnicas de comunicación y entrenarles en el uso de armas de fuego.
El BCIJ agregó en un comunicado que este individuo habría participado en campañas de reclutamiento de ciudadanos marroquíes y de otros procedentes de países subsaharianos para cometer acciones terroristas en Marruecos contra "intereses extranjeros", sin dar más detalles.
Las dos turistas, la danesa Louisa Vesterager Jespersen, de 24 años, y la noruega Maren Ueland, de 28, aparecieron decapitadas el pasado 17 de diciembre por supuestos extremistas en el valle Imlil, en el Alto Atlas, una zona conocida por el turismo de montaña.
Antecedentes por actos terroristas
Por otra parte, la Fiscalía reveló que tres de los 15 detenidos que comparecieron ante el juez de instrucción ya habían cumplido condenas de prisión por participar en otros actos terroristas.
El pasado domingo, el portavoz de la policía marroquí, Bubker Sabik, aseguró que más de 2.900 personas que ya han cumplido penas de prisión por casos de extremismo y terrorismo en Marruecos se encuentran actualmente en libertad, aunque vigiladas por los servicios de seguridad.
Tras el crimen, circuló en las redes un vídeo, cuya veracidad fue autentificada por la Fiscalía marroquí, en el que se veía a cuatro de los principales sospechosos en el crimen jurando lealtad al grupo yihadista Estado Islámico (EI).
Sin embargo, el ministro de Interior marroquí, Abdelouafi Laftit, aseguró que el crimen terrorista fue "un acto aislado" cometido por "lobos solitarios", y ningún grupo terrorista conocido ha reivindicado el ataque.
Las condenas fueron unánimes en Marruecos tras el acto terrorista, y el ministro portavoz del Gobierno, Mustafa Jalfi, dijo que se "tomarán las medidas necesarias para que este crimen no se repita", y subrayó que su país dispone de una estrategia multidimensional para erradicar todo comportamiento extremista.