Sánchez rechaza negociar 'cara a cara' como le pide Iglesias y ambos se enrocan en sus posturas
"Hay una posibilidad de que no haya elecciones", insiste el líder de Podemos, que hace referencia al modelo de Gobierno italiano.
El líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha instado este miércoles al presidente del Gobierno en funciones a sentarse conjunta y personalmente para trabajar en un acuerdo al margen de los equipos negociadores porque, ha dicho, “todavía hay una posibilidad” de que no haya elecciones.
“Sentémonos usted y yo, y pongámonos a trabajar”, le ha pedido Iglesias al socialista en el Pleno del Congreso tras reprocharle que desde la investidura fallida del mes de julio no le haya llamado ni una sola vez por teléfono.
“Le tendré que llamar yo”, ha afirmado el líder de Unidas Podemos, quien considera no obstante, que ese gesto supondría “saltarse el protocolo” que recoge que ha de ser el candidato a la Presidencia quien debe buscar sus apoyos. Esto se produce después de que el pasado martes se produjera una segunda reunión fallida entre ambas delegaciones.
Iglesias ha explicado que si ambos se sientan para tratar de llegar un acuerdo y no lo logran, al menos la gente no podrá “sentirse ofendida porque no dedicaron las horas necesarias para intentar formar Gobierno”.
También ha querido recordar al presidente de Gobierno en funciones, que asume que el veto a su presencia en el Consejo de Ministros forma parte de “las condiciones de posibilidad” para poder alcanzar un acuerdo y que no tiene problema en renunciar si realmente es “el único escollo”para evitar volver a las urnas.
Previamente Iglesias había insistido durante la primera sesión de control en el Congreso de los Diputados esta mañana, en que hacer frente a todos los desafíos que España tiene por delante, tanto en el plano nacional como internacional, resultará complejo con un Gobierno débil, en solitario y en minoría.
Iglesias ha utilizado como ejemplo el caso italiano –reciente Gobierno en coalición entre el Partido Democrático y el Movimiento 5 Estrellas– aduciendo que a pesar de las diferencias, y la “mayor dureza” en referencia a las discrepancias existentes entre ambas formaciones, estos han sido capaces de conformar un Ejecutivo.
“Se equivocara usted – Pedro Sánchez– si hace caso a sus asesores que le aseguran que por algún escaño más, le conviene volver a las urnas. Las lecciones italianas son útiles para los intereses de nuestro país”, ha asegurado.
“La gente castiga a quien va a elecciones pensando que va a tener ventaja”, ha concluido el líder de UP en su intervención.
La respuesta de Sánchez
El presidente del Gobierno en funciones, por su parte, ha cerrado el debate de su comparecencia en el Congreso pidiendo de nuevo el apoyo a Unidas Podemos para su investidura pero rechazando una nueva reunión con Pablo Iglesias.
Así, Sánchez ha reclamado a Iglesias sus votos y le ha solicitado que no le dé a la derecha una “segunda oportunidad” con otras elecciones.
Además, ha defendido el papel de la comisión negociadora de su partido, que conforman la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y la número dos del PSOE, Adriana Lastra.
Y acto seguido le ha dicho a Iglesias que si en Unidas Podemos tienen “alguna cuestión más allá del gobierno de coalición” que plantear en la mesa negociadora los socialistas les estarán “esperando”. Con esa respuesta desechaba Sánchez la posibilidad de una próxima reunión.
El jefe del Ejecutivo ha recordado que Iglesias no ha dejado de reclamar coalición, pero rechazó la que propuso el PSOE en julio, y por eso, como entonces falló esa fórmula, ha insistido en pedir al líder de Podemos que explore la propuesta programática del PSOE, con la que Podemos puede “cooperar” y “contar en muchos de los factores de gobernabilidad”.
“La pregunta que habrá que hacerles es si va a volver a impedir el que haya un gobierno del PSOE al frente del país y si va a llevar al país a elecciones”, le ha dicho Sánchez a Iglesias.
El caso italiano
El 79 % de los inscritos del Movimiento Cinco Estrellas (M5S) votaron a favor del Gobierno en coalición con el Partido Demócrata (PD), con Giuseppe Conte como primer ministro, formalizando el acuerdo pactado.
El Ejecutivo de este modo, tiene al Cinco Estrellas como “la fuerza política de mayoría”. “Se ha resuelto una crisis política inédita, en pleno agosto”, afirmaba entonces el ahora Ministro de Asuntos Exteriores, Luigi Di Maio.
Esta situación deja fuera de juego a la ultraderechista Liga y su líder, Matteo Salvini, causante de esta crisis política cuando planteó, en pleno verano, una moción de censura contra Conte que ni siquiera se ha llegado a votar.
El Ejecutivo tiene por delante la tarea de romper con el rumbo populista y enfrentado a la Unión Europea que ha mantenido el anterior Gobierno durante 14 meses, y la elaboración de los Presupuestos para 2020.