Greta Thunberg vuelve a clase tras su año sabático de lucha contra el cambio climático
"¡Sienta tan bien!", dice la joven sueca, que planea compaginar su formación con su activismo ambiental
Este 2020 enloquecido ha dado tregua a Greta Thunberg, la joven activista contra el cambio climático, perseguida y juzgada por los medios y los ciudadanos, bajo la lupa en cada decisión que tomaba. Posiblemente, la más polémica fue su apuesta por dejar el colegio temporalmente y dedicarse a pelear, porque “nuestra casa está en llamas” y no queda tiempo que perder. “Volveré”, dijo. Y lo ha hecho: su año sabático ha terminado y ya está en el instituto.
La joven sueca, de 17 años, ha publicado en sus redes sociales una foto en la que se le ve con una mochila, empujando una bicicleta. Añade un texto feliz: “¡Mi año sabático de la escuela terminó y sienta tan bien estar finalmente de regreso en la escuela!”.
Thunberg, que desató un movimiento de protesta mundial liderado por jóvenes después de hacer huelga frente al Parlamento de su país, cada viernes, en 2018, ha pasado el último año reprendiendo a los políticos sobre el aumento de las temperaturas y lo que ve como su incumplimiento de los acuerdos consagrados en el Acuerdo Climático de París de 2015.
Persona del Año de la revista Time en 2019, Greta habló en el Foro Económico Mundial de Davos y en la cumbre del clima COP25 en Madrid durante los últimos 12 meses, pidiendo acciones urgentes para prevenir un desastre climático.
En una entrevista con Reuters en julio, Thunberg dijo que los líderes en el poder prácticamente habían renunciado a dejar un futuro decente para las generaciones futuras. Con Europa comenzando a emerger de las restricciones por coronavirus, se ha pedido que el fondo de recuperación de la UE se utilice para promocionar una transición a una economía “verde”. Justo la activista ha confirmado que ha tenido síntomas de la enfermedad, sin mayores consecuencias.
Thunberg va a seguir con su activismo, aunque tendrá que reducir sus viajes al exterior. De momento, la semana pasada se vio en Berlín con la canciller alemana, Angela Merkel, la semana pasada, junto a otros jóvenes líderes de la pelea ambiental, e instó a la mandataria a salir de su “zona de confort” y acelerar las acciones para combatir la emergencia climática.