Granados lanza un órdago a Esperanza Aguirre y pide que declare ante el juez
Sucede después de publicar la irónica carta "Querida Esperanza".
Francisco Granados, antiguo 'numero dos' del Gobierno de Esperanza Aguirre en Madrid y principal imputado en la Operación Púnica, le ha lanzado un órdago a su antigua jefa. Según revela Infolibre, ha pedido al juez que la expresidenta del PP madrileño declare ante él por su implicación en el caso.
Concretamente, el exsecretario general del PP madrileño pide que se le pregunte a Aguirre por el papel que tenía él, por la influencia que pudo ejercer sobre diversas operaciones urbanísticas y confiese si tenía la "superioridad jerárquica" que la Unidad Central Operativa de la Guardia Civil le atribuye.
Granados, en prisión preventiva desde hace más de dos años, también ha pedido la comparecencia en los tribunales de otros importantes cargos de su gobierno, entre ellos los consejeros Jaime González Taboada, Mariano Zabía, Beatriz Elorriaga, Ana Isabel Mariño y Santiago Fisas.
SIGUE UNA NUEVA ESTRATEGIA
El lunes publicó en okdiario una carta titulada irónicamente "Querida Esperanza", en la que le dice que "todo" lo aprendió de ella y que en Madrid no se hacía nada sin su conocimiento y aprobación cuando ella estaba al mando. Posteriormente, se la envió a Aguirre, ahora portavoz del PP en el Ayuntamiento.
Se desconoce el objetivo de la estrategia de Granados, pero sucede después de dos hechos clave en la investigación de la supuesta financiación ilegal del PP de Madrid. El primero es la confesión de David Marjaliza, empresario beneficiado por la trama, en busca de un trato favorable en los tribunales.
El segundo, las crípticas declaraciones del abogado del mismo Granados en diciembre ante los medios ante la pregunta de si Granados estaba decidido "a tirar de la manta para salir": "No, porque tirar de la manta es siempre quitársela a otro y en su manera de ser eso no figura".
AGUIRRE NO SE HA PRONUNCIADO
Aguirre no se ha pronunciado al respecto y sólo ha dicho que desea que se aclare cuanto antes el caso. "No comento nada sobre un asunto que el juez mantiene en secreto", ha añadido.
Asediada por los periodistas en el centro de la capital, Aguirre se ha detenido ante un paso de cebra y ha comenzado ha repetir, en medio de micrófonos y cámaras pero sin mirar a nadie, "500 millones..., 500 millones...., 500 millones".
Quinientos millones de euros es el presupuesto que, según Aguirre y como le había dicho un poco antes a los vecinos, el Ayuntamiento gastará en remodelar aceras y otras obras de pavimentado en calles de Madrid, motivo por el cual se encontraba en el centro de Madrid.