Forcadell no contestará al Tribunal Supremo sobre los indultos: "Quieren humillarnos"
Cree que no es preceptivo pedir a los presos que se expresen y no quiere "entrar en su juego".
La expresidenta del Parlament Carme Forcadell ha anunciado este jueves que no contestará al Triubnal Supremo (TS) sobre las peticiones de indulto porque cree que no es un trámite preceptivo y que tiene unos intereses detrás: “Lo que quieren es humillarnos”.
“Personalmente no voy a responder porque no sé a qué motivo obedece que me hagan a mí esa pregunta cuando en los otros casos no se ha hecho”, ha sostenido después de que el Supremo diera el miércoles cinco días de plazo a los presos del 1-O para que expresen lo que consideren conveniente acerca de las peticiones de indulto formuladas a su favor, de cara a que el TS elabore su informe al respecto.
Forcadell ha afirmado que nunca se había pedido a presos manifestarse sobre peticiones de indulto que han hecho terceras personas, por lo que ha defendido que no contestar es la manera de “no entrar en su juego y en su relato”.
“Esto no se hace, ni es preceptivo ni es necesario ni se ha hecho en otros casos. ¿Por qué se hace ahora? Precisamente entiendo que es para humillarnos. Por eso creo que no hay que contestar, no hay que entrar en su relato ni en su juego”, ha añadido.
Considera que no contestar no debería obstaculizar el trámite de los indultos, porque cree que está en su derecho y que la decisión de conceder el indulto es del Gobierno central “independientemente de lo que opine el Tribunal Supremo”, y ha expresado su respeto por lo que puedan hacer otros presos, como el presidente de Òmnium, Jordi Cuixart, que sí que ha contestado diciendo que su prioridad no es salir de prisión y que prefiere la amnistía.
De hecho, Forcadell también ha insistido en que lo que debería aplicarse es la amnistía y no el indulto porque es una solución colectiva y no individual, y “demostraría la voluntad del Gobierno de solucionar el conflicto y llegaría a todos los represaliados” independentistas, no solo a los presos del 1-O.
“No me quiero adelantar”
Preguntada por si le gustaría recibir el indulto para mejorar su situación personal aunque considera que no es una solución al conflicto, la expresidenta de la Cámara catalana ha contestado que solo se pronunciará si llega: “No quiero hablar porque también afecta mucho a nuestras familias. Si nos oyen mucho hablar, cuando las llamas se hacen ilusiones, intento ser realista. Cuando llegue me pronunciaré, de momento no ha llegado todavía. No me quiero avanzar”.
“El ministro de Justicia dijo que antes de final de año llegaría una propuesta de reforma del Código Penal. Estamos a mes de mayo y no ha llegado nada”, ha criticado, de manera que ha rechazado posicionarse sobre el indulto ni otras medidas por el momento.
Además, ha responsabilizado al Supremo y no al Gobierno central el retraso del indulto porque es el tribunal el que se ha demorado con el informe preceptivo que debe remitir antes de que el Ejecutivo de Sánchez dicte el indulto, pero cree que el TS también se ha guiado por criterios políticos y ejemplo de ello es que haya anunciado este nuevo paso de la tramitación una vez se han celebrado las elecciones de la Comunidad de Madrid: “Es un tema político”.
Mejorar el sistema penitenciario
Forcadell publicó hace unos meses el libro ‘Escrivim el futur amb tinta lila’ ―Escribamos el futuro con tinta lila― (Destino), en el que relata su experiencia en prisión y narra las acciones que ha llevado a cabo dentro de la cárcel para mejorar las condiciones de las mujeres presas, y espera que sirva para que la sociedad conozca la situación de estas mujeres.
A partir de su experiencia en prisión, la expresidenta del Parlament ha apostado por que el sistema penitenciaro sea más abierto, de manera que los internos puedan tener un trabajo en la sociedad durante el día y pasar la noche en la cárcel, ya que considera que esto ayudaría a que estén “más en contacto con la sociedad a la que se tienen que reincorporar”.
Esta es una de las propuestas que ha trasladado a la consellera de Justicia, Ester Capella, y ha afirmado que la Conselleria también está de acuerdo con abrir el sistema penitenciario pero que es una “cuestión de presupuesto” y espera que la nueva cárcel de mujeres que la Generalitat construirá en la Zona Franca de Barcelona para sustituir la de Wad-Ras, donde está actualmente Forcadell, se adapte a este modelo de prisión que propone.