Maixabel Lasa: "El mensaje de Otegi llega tarde, pero más vale tarde que nunca"
La viuda de Juan Mari Jáuregui, cuya vida inspiró la película 'Maixabel', atiende a 'El HuffPost' tras las palabras de Otegi, que considera "van por el buen camino"
Al otro lado del teléfono responde una voz alegre. Es un día histórico para Maixabel Lasa y su gente, uno más, porque lamentablemente ya ha tenido que sufrir mucho desde que ETA asesinó a su marido en el año 2000. Pero las palabras de Arnaldo Otegi sintiendo por primera vez dolor por las víctimas era algo que le venía reclamando desde hace tiempo y, aunque llegan tarde, “van por el buen camino” para alcanzar la paz y la convivencia en el País Vasco.
“Esperaba que lo dijera hace mucho tiempo, pero personalmente me parece estupendo, más vale tarde que nunca”, reconoce a El Huffpost, después de llegar de una promoción en Barcelona de la película ‘Maixabel’ inspirada en su historia y que está siendo un éxito en las salas de cine.
A pesar de que para ella el mensaje del dirigente de EH Bildu que llega “a toro pasado” le parece positivo para el trabajo pedagógico que están realizando las instituciones con el objetivo de evitar que la historia se repita. “El ser humano es capaz de hacer lo mejor y lo peor y, a la vez, el ser humano tiene que tener esa segunda oportunidad para poder remendar los errores”, apunta.
Lasa es una fiel defensora de las segundas oportunidades, incluso hasta para los asesinos de su marido, con quien tuvo la oportunidad de entrevistarse durante los encuentros restaurativos entre víctima y verdugo. Es más, hasta llega a suponer que estas iniciativas, capaces de “remover cosas”, puede que tengan algo que ver con el reconocimiento de Bildu.
Ahora vive alejada del rencor y el dolor junto a su hija y sus nietos y les inculca esos valores porque no quiere que vivan en esa perspectiva. “Efectivamente lo que pasó, pasó, y el rencor y el odio no ayuda a superarlo”.
Además recuerda que su marido era también así de positivo y que incluso “hubiera llegado a hablar con los que le mataron” si le hubieran dado esa opción. esa positividad era la que su esposo le había inyectado durante el tiempo que compartieron juntos. ”Él era así, aquel (su marido) hablaría hasta con los que le mataron y de convencerles de que no hicieran lo que iban a hacer”.
No piensan lo mismo las asociaciones de víctimas del terrorismo o la derecha política que han rechazado las palabras de Otegi. Sobre este punto, Lasa indica que respeta su opinión, pero para ella es una noticia esperada y que “va por el buen camino”.
La exdirectora de la Oficina de Atención a la Víctimas del Terrorismo del Gobierno vasco añade que aún hay asuntos por hacer y menciona los homenajes a los terroristas. Lasa entiende la alegría de familiares y amigos pero a la vez reclama que esos homenajes de los terroristas a su salida de prisión tienen que hacerse a nivel privado y no ocupar espacios públicos. ”Éticamente no son defendibles y menos cuando la persona que sale de la cárcel no haya dicho nada de su responsabilidad en los actos cometidos y no haya reconocido el daño causado”, critica.
Diez años sin ETA
El 20 de octubre se cumplen diez años desde que ETA anunció el alto al fuego permanente y buscaron una vía política llegando a las instituciones públicas.
Maixabel recuerda que esa noticia la recibió en su casa viendo la televisión y compartiéndola con sus amigos y familiares. “A mí me cambió la vida” y asegura que, entre otros puntos, como muchos otros, dejó desde ese día de tener un escolta.
Asimismo explica que la convivencia no va a ser muy diferente de lo que existe ahora y que el fin de ETA no consiste en “darte abrazos por la calle”, sino que es el respeto al diferente y que en eso se está trabajando.
Aún así, ETA tiene pendientes que aún reclaman asociaciones como el esclarecimiento de más de 300 casos. Sobre este tema, Maixabel Lasa señala que Arnaldo Otegi “no tiene la llave de todo” y recuerda que también hay casos del Batallón Vasco Español o los GAL sin resolver. Y confía en que llegará porque, como ella dice, todo tiene su tiempo.