Eso significa que al menos 54 diputados tories han presentado cartas de no confianza contra el primer ministro. Entre las 18:00 y las 20:00 horas de esta tarde (19:00 y 21:00, hora peninsular), todos los diputados tories votarán sobre el futuro de Johnson al frente del número 10 de Downing Street.
Sigue leyendo todo lo que necesitas saber sobre este proceso parlamentario y por qué podría ser definitivo para Johnson.
¿Cómo se plantea una moción de confianza?
Para plantear esta clase de desafío al liderazgo, el 15% de los diputados conservadores tienen que presentar una carta de no confianza.
Teniendo en cuenta el poder actual del partido en el Parlamento, esto significa que al menos 54 diputados tories han firmado una carta.
El número de cartas podría ser mayor que el que se conoce públicamente, ya que los diputados no están obligados a revelar si han presentado una ni cuándo.
Estas cartas se envían en secreto a Sir Graham Brady, un veterano diputado tory que dirige el órgano de todos los diputados conservadores, conocido como el Comité 1922.
Solo Brady sabe cuántas cartas se han presentado.
En 2018, cuando los diputados se movilizaron para destituir a Theresa May, Brady dijo que ni siquiera le reveló a su esposa cuántas cartas había guardado en su caja fuerte.
En un comunicado, Brady ha expicado que la votación se llevará a cabo esta tarde entre las 18 y las 20 horas.
“Los votos se contarán inmediatamente después. Se hará un anuncio a la hora que se indique. Los detalles se darán a conocer más tarde”.
Los 359 diputados tories emitirán un voto secreto. Boris Johnson necesita alcanzar una mayoría simple para seguir en el cargo. Esto significa que si todos los diputados votan y ninguno se abstiene, necesita 180 votos de confianza.
¿Qué pasa si supera la moción?
Si Johnson gana la moción de confianza, según las propias normas del partido, no podría celebrarse otra hasta dentro de un año.
Así sucedió en diciembre de 2018, cuando los diputados tories fracasaron en un intento de deshacerse de Theresa May, que ganó y logró aferrarse al liderazgo hasta junio de 2019.
Muchos conocedores de Westminster creen que el primer ministro superará la votación, pero aunque así sea, la autoridad de Johnson quedará enormemente dañada.
¿Qué pasa si NO supera la moción?
Si Johnson pierde la moción de confianza, se pondrá en marcha un proceso de elección de liderazgo.
Johnson no puede presentarse a la reelección como líder, pero es probable que permanezca en funciones hasta que se elija a su sucesor.
¿Cómo es el proceso de elección del nuevo líder?
Las elecciones al liderazgo del Partido Conservador constan de dos etapas.
En la primera etapa, los diputados tories votan en una serie de rondas para reducir la lista a solo dos candidatos. En la última votación por el liderazgo de 2019 esto tardó aproximadamente dos semanas.
En la segunda etapa, los dos candidatos finales se someten a la votación de los tories. En 2019, cuando Johnson se enfrentó a Jeremy Hunt, esta etapa duró alrededor de un mes.
Según se comenta, los principales candidatos al liderazgo ya han empezado a planificar sus campañas a la espera de los resultados de la moción.
Si los parlamentarios tories consiguen que la moción contra Johnson se desarrolle rápido, significaría que habría un nuevo primer ministro a tiempo para la conferencia anual del partido en octubre.
El nuevo líder tendría hasta enero de 2025 antes de tener que convocar elecciones generales.
Este artículo fue publicado originalmente en el ‘HuffPost’ Reino Unido y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.
Las cosas de Boris Johnson
Manejando una grúa durante una visita a las obras de un puerto en Blackpool
Efectivamente, dentro de un caza de las fuerzas aéreas británicas (RAF)
Podría ser una foto más, pero se trata de una visita al centro de control donde se estaba construyendo una central nuclear
Quizás no era la mejor forma de posar durante su visita a la India.
En su visita a la India aprovechó para saludar a una deidad
Si hace falta pinta él las líneas del campo de juego, como en esta visita al césped del Bury FC
A los mandos de un brazo robótico, echando una mano durante una visita a un centro de FP de Burnley
Johnson, haciendo algo extraño con las manos durante una conexión en directo con el presidente ucraniana, Volodímir Zelenski
Johnson disfrutando de los cuadros del Museo de Prado antes de la cena de líderes por la Cumbre de la OTAN en Madrid
Están todos contados, Boris. Y conocemos el catálogo del British Museum
'¿El parecido es razonable?'. Fuera bromas, es un retrato de la reina de Inglaterra.
Y sí, el retrato lo hizo él.
No estamos seguros de si está preguntando si lo tienen en un tamaño más grande, pero este es un momento de su visita a una fábrica militar en Belfast
¡No, por favor! Decidnos que eso está descargado.
Ojalá supiésemos qué le ha dicho este niño de una escuela de Kent a Boris Johnson
Johnson, en la misma visita a la escuela de Kent, pero tras 'pasar de curso'
Una auténtica rareza en su carrera política, en esta imagen está dimitiendo
Johnson en una fotografía tomada el 13 de noviembre de 2020, durante la pandemia, en lo que aseguró que era una "reunión de trabajo"
Johnson, ayudando a un estudiante de fontanería de un centro de Blackpool con las medidas de un tubo
Johnson, en el mismo centro educativo, pero esta vez poniendo su granito de arena para terminar un muro
A punto de embarcar hacia Kiev para visitar al presidente ucraniano, justo después de que saliese publicado el informe del 'partygate'
Vale, en esta no sale Johnson, pero esta es la cara del gato Larry (la mascota de Downing Street) el mismo día en que Boris dimitió
Johnson, a punto de cortar un pepino recogido de una granja de Cornwall por él mismo. Y bajo la atenta mirada de preocupación de su acompañante.
Johnson, visiblemente satisfecho por la producción británica de brécol.
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Las mil caras (y gestos) de Boris Johnson. Un personaje popular y populista que ha dejado no pocas imágenes 'sui géneris'. Y es que jugando a la cuerda con traje, corbata y zapatos la cosa pintaba fea.
Johnson, ¿dejándole paso? al canciller federal alemán Olaf Scholz en un paseo durante la última reunión del G7
Johnson, nada agobiado por la presencia de periodistas antes de aterrizar en Madrid para asistir a la Cumbre de la OTAN 2022
No solo se le ve practicando deportes, también (hace que) trabaja, como en esta imagen.
Un poco de "running" con bermudas de playa. Peligrosa mezcla.
En su etapa de alcalde de Londres se implicó mucho en promocionar deportes como el rugby de cara a los Juegos Olímpicos. Quizá demasiado. Pobre niño...
Pero en un plano más "serio", fue uno de los grandes referentes de la campaña por el "Sí al Brexit". Por supuesto, su campaña fue "a lo Boris Johnson".
En cualquier lugar y con cualquier objeto: a la salida del bus promocional para el "Vote Leave" contra la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea.
No sabemos si es fan de Pink Floyd, pero aquí hizo un guiño a su "Another brick in the wall".
Otro momento deportivo; ahora toca cricket.
Y con la vuvuzela, que tan popular se ha hecho en los últimos mundiales de fútbol.
Si tenía que mojarse por un tema, lo hacía. Literalmente.
Otro momento rugbístico en una sesión de "entrenamiento" grupal.
Un gesto de extraña explicación en plena comparecencia.
Su look con ese flequillo despeinado a veces le ha jugado malas pasadas.
Indefinible.
¿Un remake de "Los gemelos golpean dos veces"?
Si es lo que parece, el voleibol paralímpico no se le da muy allá.
Rugby, voleibol, atletismo... y un poco de tenis, como en este partido benéfico en Queen's.
Cuando estaba a un paso de ser el primer ministro británico, parecía haberse vuelto más "formalito". Aunque con Boris nunca se sabe.
Cuando estaba a un paso de ser el primer ministro británico, parecía haberse vuelto más "formalito". Aunque con Boris nunca se sabe.
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Visitó la India y esta foto era absolutamente inevitable
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En cualquier lugar y con cualquier objeto: a la salida del bus promocional para el "Vote Leave" contra la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea.