Cs se abre a pactos con barones del PSOE que "renieguen" de "separatistas y populistas"
Los 'naranjas' no prevén negociar con Vox y dan prioridad al PP
Ciudadanos no prevé negociar directamente con Vox ningún gobierno municipal o autonómico y da prioridad a un pacto a la andaluza con el PP en todos los sitios, mientras que en las negociaciones con los barones socialistas exigirá como condición expresa el respaldo a la aplicación del 155 en Cataluña.
De este modo, el secretario general de Cs, José Manuel Villegas, ha enfriado la posibilidad de llegar a algún acuerdo con los socialistas en comunidades como Castilla y León o Aragón, donde el partido naranja tiene la llave.
El comité nacional de negociación de gobiernos, que creó ayer la dirección de Cs, se ha reunido esta mañana por primera vez con Villegas al mando, quien ha insistido en que ve “muy complicado” llegar a acuerdos con el PSOE en comunidades autónomas salvo que “renieguen” de la política de acuerdos con “separatistas y populistas” de Pedro Sánchez.
Ha señalado que sería “muy difícil” alcanzar pactos electoral con “el PSOE de Sánchez” y ha comunicado que quieren ver si en algún sitio “hay alguien que reniegue de las políticas de Sánchez, de los pactos con separatistas y populistas y que crea que es hora de aplicar el 155 en Cataluña”.
“Si hubiera alguien en algún sitio, ahora mismo no lo vemos, también se podría hablar. Pero lo normal es que lleguemos a acuerdos con el PP”, ha afirmado.
El dirigente ‘naranja’ ha dicho que no pretenden pedir una “inmolación” a los candidatos socialistas que aspiren a pactar con Cs. Simplemente, “cuando tengamos un acuerdo, vamos a pedir que haya una coherencia” con esos principios de “unión e igualdad de todos los españoles”, ha agregado.
En su opinión, “lo lógico” es que el apoyo a esos principios y el rechazo a los pactos con Podemos y con las formaciones independentistas quede plasmado por escrito en el mismo acuerdo de gobierno que firmarían las dos partes.
Sobre la aplicación del 155 en Cataluña, “una de las discrepancias con Pedro Sánchez en política territorial”, ha afirmado que Ciudadanos sigue viendo necesario aplicar ya esta medida y, por lo tanto, “será una de las condiciones” que tendrán que aceptar los socialistas que deseen un acuerdo con el partido naranja.
“Creemos que no se puede aguantar ni un minuto más el pulso de los separatistas en Cataluña, no se puede permitir que los golpistas sigan adelante con sus políticas de ruptura desde el Gobierno de la Generalitat, sin respetar la Constitución y el Estado de Derecho y teniendo como único objetivo la ruptura de España”, ha subrayado.
Murcia, Aragón, Castilla y León y Madrid
El secretario general ha evitado referirse a casos de comunidades autónomas concretas por las que se le ha preguntado, negándose a adelantar cuál será la posición Ciudadanos en Murcia, Aragón, Castilla y León o Madrid, donde podrían pactar tanto con el PP como con el PSOE.
En relación con las declaraciones del candidato de Cs a la Presidencia de la Junta de Castilla y León, Francisco Igea, sobre el fin de una etapa y la necesidad de un cambio en esta comunidad -donde el PP gobierna desde 1987-, Villegas ha dicho estar de acuerdo con él en que “se ha acabado una era, la del bipartidismo”, y que ahora Cs tendrá un papel fundamental en muchos gobiernos autonómicos y locales.
“Pero eso no prejuzga cuáles van a ser los pactos”, y “a día de hoy no hay posibilidad de decir en un sitio determinado estamos más cerca de un partido o de otro”, ha aclarado.
En cuanto al hecho de que algunas comunidades estén gobernadas por un mismo partido desde hace mucho tiempo, no cree que deba ser necesariamente un factor decisivo a la hora de decidir con quién pacta la formación naranja, como sí lo fue en Andalucía, donde exigían un cambio para poner fin a los gobiernos socialistas.
El dirigente de Cs ha declarado que comenzarán “de inmediato” las conversaciones con el PP y con el secretario de Organización del PSOE, José Luis Ábalos, para establecer el procedimiento de negociación tras los comicios municipales y autonómicos. Pero ha avisado de que las negociaciones no serán rápidas y que en algunos sitios serán “largas y dificultosas”.