¿Sabes qué formación tiene el entrenador de tu gimnasio?

Son un par de ejemplos, pero muchos dicen que muestran la punta del iceberg. Dos personas tuvieron que ser hospitalizadas a principios de julio en Sevilla tras someterse a sendas sesiones de electroestimulación muscular, una técnica que utiliza una corriente eléctrica para, supuestamente, perder peso. Ambos sufrieron rabdomiólisis, una patología producida por un ejercicio demasiado intenso. Los expertos advierten de que esa es una consecuencia de la falta de regulación, que hace que, en la mayoría de las comunidades autónomas, cualquier persona pueda ejercer cualquier profesión relacionada con el deporte sin necesidad de titulación.

Por eso, muchos licenciados en Educación Física y en Ciencias de la Actividad Física y del Deporte llevan meses movilizándose para que las Administraciones Públicas tomen cartas en el asunto y aprueben una regulación profesional para el sector. Las reivindicaciones, que en Twitter se agrupan bajo el hashtag #RegulaciónProfesionalYa, van dando sus frutos. Cataluña fue pionera en aprobar una regulación en 2008 y luego le siguieron La Rioja y Extremadura. Este mismo julio fue el turno de Andalucía y en octubre podría sumarse Madrid, que ha retrasado la decisión definitiva hasta otoño provocando la indignación de los profesionales.

Una de las principales consecuencias de esas leyes es que sólo quienes tienen la titulación oficial adecuada pueden ejercer profesiones relacionadas con el deporte. Carlota Díez Rico, secretaria del colegio de Licenciados de Educación Física de Madrid, subraya la importancia de la medida: “Ahora mismo, tú vas a un gimnasio y tu entrenador personal puede ser una persona que no tenga ninguna titulación más que la ESO”.

"TE PUEDEN PASAR COSAS"

Eso, incide, puede tener consecuencias peligrosas si alguien sufre problemas de salud como, por ejemplo, hernias discales, patolologías del corazón o de las articulaciones. “Esa persona te va a entrenar o te va a dar clases colectivas y nadie le ha preguntado qué titulación tiene”, advierte Díaz mientras recuerda el caso de una persona que entrenaba en un gimnasio y tenía problemas lumbares y hernias. “Había hecho unos ejercicios que no estaban nada recomendados para esas patologías y le había salido una hernia umbilical. Te pueden pasar cosas”, avisa.

Díez asegura que están “realmente preocupados” porque la gente practica más ejercicio, se está empezando a tener “cultura deportiva” y cada vez se acude más a gimnasios y a centros deportivos. “¿Pero en manos de qué profesionales estamos? ¿Están cualificados? Y nos preocupan los niños porque para impartir las actividades extraescolares tampoco se pide una titulación concreta”, alerta.

Ciudadanos, el partido que más está impulsando la regulación profesional, advierte de que el 40% de los preparadores físicos en activo no tienen la titulación adecuada y hasta un 35% de trabajadores del sector no tiene ni siquiera un contrato.

"LO QUE QUIEREN ES COLOCAR A SUS TITULADOS"

Mientras, muchos empresarios del sector guardan silencio. El Huffington Post ha intentado, sin éxito, recabar la opinión sobre el asunto de la Federación Nacional de Empresarios de Empresas Deportivas, de asociaciones regionales como la valenciana y de la Asociación Profesional Española de Centros de Enseñanza Deportiva.

“Lo que quieren es colocar a sus titulados en nuestras instalaciones sin estar preparados para ello, pues estudian otros temas que no son los nuestros”, se quejan desde la Federación de Empresarios de Instalaciones Deportivas de Andalucía, que denuncia que sus puntos de vista no se han tenido en cuenta en la elaboración de la nueva legislación regional. En su opinión, el sector “va mucho más allá de los ciclos formativos actuales” y la formación “no lo es todo”, por lo que exigen que se les trate de “igual a igual” y que se les consulte cualquier cambio en la legislación, como el IVA o los convenios colectivos, porque son “la patronal del sector”.

Los titulados en ciencias de la actividad física denuncian, en cambio, que los empresarios muchas veces prefieren contratar a personas que dominan las actividades colectivas en lugar de gente que sepa de anatomía o de biomecánica porque “lo único que les importa es el show y no la salud”. Alicia Martín, presidenta del colegio de Licenciados de Educación Física de Madrid, dice que lo que ocurre ahora en muchas comunidades es como si en un hospital quien operase no fuera el cirujano, sino un celador o un enfermero.

"NO QUIEREN LA LEY"

Subraya que no se puede generalizar porque hay muchos empresarios que están haciendo “las cosas muy bien”, pero que hay “una minoría” a los que “les viene muy mal” una regulación porque están “poniendo en sus empresas a gente sin ningún tipo de cualifiación, a entrenadores personales que a lo mejor cobran 50 euros la hora y que igual ni han estudiado”. “Por eso guardan silencio. Porque no quieren la ley. Prefieren contratar a amigos o al panadero, pero no lo pueden decir públicamente porque la ciudadanía se les echaría encima. Les dirían: ‘¿Os estamos pagando algo y no nos atienden personas cualificadas?”

Entonces, ¿qué titulación deben tener quienes trabajen en el sector? Martín subraya que, de entrada, deben quedar descartados los títulos no oficiales que proliferan en Internet y que prometen formar a alguien como entrenador personal en un fin de semana.

La ley suele recoger cinco profesiones, para las que se pide diferente titulación: monitor deportivo (lo pueden ejercer personas con un módulo de FP y los graduados o licenciados en ciencias de la actividad física); entrenador o entrenador deportivo (se necesitan títulos federativos oficiales), preparador físico (hay que ser graduado o licenciado en ciencias de la actividad física y del deporte), director deportivo (se necesita la misma titulación que en el caso anterior) y profesor de Educación Física, que se rige por la ley de educación.

Los empresarios subrayan la delicada situación en la que quedan los “profesionales del sector que no tienen esas titulaciones pero que vienen desarrollando actualmente su desempeño”. Mientras, los titulados aprietan el paso para lograr una regulación profesional en toda España. ¿Llegarán pronto a su meta?