Las primarias del PSOE, explicadas en 5 claves
Las primarias del PSOE para designar a su cabeza de cartel el próximo 26 de junio arrancan este domingo marcadas por la ausencia de rivales que compitan con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y por unos plazos que han quedado reducidos a sólo dos semanas por las aperturas del calendario electoral.
Son las terceras primarias que encara Sánchez desde que fue elegido secretario general en julio de 2014, aunque solo tuvo que someterse a la consulta de los militantes en aquella ocasión, puesto que el año pasado ya se quedó sin rivales al aspirar a la Moncloa.
Estos son las claves del proceso que hoy se pone en marcha:
Todo el calendario de la consulta está encajado en dos semanas debido a que las listas tienen que estar presentadas ante la Junta Electoral Central el 23 de mayo.
En las primarias convocadas el pasado año para ser candidato en los comicios del 20 de diciembre, los plazos que marcó Ferraz tenían una duración de casi dos meses, aunque finamente no se agotaron porque no fue necesaria la consulta a las bases.
Aunque los aspirantes tienen desde el 2 al 7 de mayo para intentar recoger los avales, está descartado que pueda aparecer alguien que le pueda hacer sombra a Sánchez.
Los barones territoriales críticos no quieren dar la batalla en puertas de unas nuevas elecciones y posponen la posible pugna al próximo congreso del PSOE, aún sin fecha, para ver si Sánchez mejora o no los resultados del 20 de diciembre.
Cualquier militante puede presentarse a las primarias, aunque para llegar a ser candidato, necesitaría recoger en solo seis días el 5 por ciento de los avales de los afiliados censados (189.167), lo que supone alrededor de 9.450 firmas.
El abogado sevillano Sergio Cebolla ha anunciado su disposición a ser precandidato, si bien ha pedido a Ferraz que se suprima la recogida de avales para facilitar la participación.
En las primarias del pasado año, hubo cuatro precandidatos que aspiraron a competir con Sánchez, pero el que más avales recogió fue Cebolla, con 156, por lo que al final no hubo votación.
Si el 7 de mayo no hay nadie que tenga los avales suficientes, Sánchez será proclamado al día siguiente candidato a presidente del Gobierno y no será precisa la votación programada el 14 de mayo.
Aunque no se esperan competidores, el secretario general tiene también que recoger las firmas requeridas. El pasado año, presentó 27.249 avales.
(Puedes seguir leyendo tras la foto...).
Pedro Sánchez, César Luena y Patxi López, en el comité socialista de ayer.
En el supuesto de que finalmente hubiera votación el 14 de mayo, podrían participar los 189.167 militantes censados a 30 de enero de este año, entre afiliados del PSOE y del PSC y de las Juventudes Socialistas de ambas formaciones.
Como ya se estableció el pasado año, también podrían votar los simpatizantes del partido, así como cualquier ciudadano mayor de 16 años que solicite incorporarse al censo previo pago de dos euros.
Los socialistas fijaron este sistema de elección de sus candidatos en 1997, en el congreso federal en el que Joaquín Almunia relevó a Felipe González en la secretaría general.
Aunque se han convocado cada vez que ha habido elecciones, también autonómicas y municipales, solo ha habido una votación para elegir candidato a la Moncloa.
Fue en 1998, cuando Josep Borrell se impuso a Almunia, si bien el primero dimitió posteriormente y el entonces secretario general fue el aspirante en los comicios de 2000.